Poema de Amanda Espejo
ARRINCONADO
Están lloviendo hojas muertas
en el campo de la añoranza...
La antigua alameda está desierta.
Ellos,
los de antaño en follaje verde
han cedido y sucumbido
ante el brazo hambriento de la sierra
y el tranco seco del cemento.
¡ El hombre viene !
Y vino...
Sólo un último gigante
mártir por opción y arrinconado
se mantiene erguido, mientras,
de su brazo herido se desprende
una lluvia de hojas secas
que de secas, no están muertas:
no más que en tránsito.
No más que un eslabón del ciclo
que renueva la vida en la tierra.
Doblado, el enraizado ruega
que así como el hombre vino...
Se vaya.
© Amanda Espejo
6 Comments:
Amanda, en algún lado había leído ya este poema y hoy me produce la misma sensación:nostalgia y tristeza a la vez, por lo avasallante de los tiempos, que no repara en conservar la memoria sino que arrasa y olvida.
Felicitaciones,
Juany Rojas
Gracias Juany...seguramente, ha de haber sido en una de las "manchitas", pues tengo en mente que lo puse allí.
No sabía que Gus lo había publicado, y me llevo esta alegría hasta mi blog!
(bellísimas las hojas)
Besos
Muy bueno Amanda y profundo. Bravo!
Amanda: La destrucción de la tierra, la muerte de los árboles, expresados con imágenes de gran fuerza y dolor. Te felicito, esa "lluvia de hojas secas" y ese "gigante " herido nos conmueven, porque son dolor y denuncia.Saludos poéticos y felicitaciones por este excelente poema Irene Marks
"una lluvia de hojas secas que de secas, no están muertas: no más que en tránsito"
Me conslará esta frase a partir de ahora, cada vez que me sienta seca. Gracias.
Buenísimo alegato en defensa del bosque, de nuestros amigos los árboles,felicitaciones por la sensibilidad ecológica y poética, por amor a los gigantes heridos, un abrazo,María Chapp
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