Poema de Isabel Krisch

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corta arriba el bisturí
la mano amputa el órgano
a la derecha secciona a la izquierda hunde
el filo tan frío separa la carne
manipula una y otra vez el tajo
se ensancha se extiende el fluente derrama
la mano que mutila ahora cose
de adentro hacia fuera el hilo sostiene
un punto que sube estira aprieta el lazo
se envuelve a sí mismo
repite la acción una vez y otra
los planos labiados confluyen
se ordena la efusión en su ritmo

la marca más notable en lo profundo
en la superficie una roja línea ... apenas

© Isabel Krisch