Poema de María Cristina Azcona
Caídos en Malvinas
Un casco y un garrón…
En esta tierra a diario
la ilusión se ve perdida
Un casco y un color
Que el viento desvanece,
Se hunden en los mares
Las palabras, tantas veces
Aquel soldado
Que pudo haber sido amigo mío
Se abrazó a ese compañero
Con los pies helados
Sus ojos revisaban horizontes
Tan desconsolados
La vianda no llegaba y no llegaba
Y hoy tan sólo hay una cruz
Un casco y un garrón en nuestro corazón.
Que así deshoja las palabras de un adiós
A tanto joven que su vida nos dejó
Un casco y un garrón
Que el viento desvanece
Mientras se hunden en los mares
Las palabras, tantas veces
Un tango se vislumbra en la distancia
Soldados que pudieron ser amigos
De mis jóvenes amigos…
¡Qué lastima me da la sangre joven
Que la estupidez humana así derrama!
Un tango y un garrón…
En esta tierra a diario
Se hunde en mares solitarios la ilusión.
Fallen in Malvinas Islands
A helmet and a grief
Daily in this place
A dream is being lost
A helmet and a tune
Vanished by winds
The words are many times
submerged on the seas
That soldier
Could have been my friend?
clinching to his partner
His eyes stare the horizon line
So much distant now
With his feet full of ice
Where went the promised food ?
Today into our heart
There’s only a cross
A helmet and a grief
Defoliated farewell’s words
Young hero has lost his life as well
A helmet and a grief
Vanished by winds
While words, so many times,
Sink in lonely seas.
A Tango is seen on distance
Soldiers… Could have been friends
of my own friends?
My younger brothers or my friends
What a shame and what a pity
So many human beings
Their blood is gone
By human idiocy
Their blood lost
A Tango and a grief
Daily in this place
A dream is sunk on silent seas
© María Cristina Azcona
3 Comments:
Bello homenaje María Cristina, curiosamente traducido al inglés...
Un abrazo Gus.
Triste y desoladora realidad, el precio de la torpeza y la ignorancia. Poema conmovedor.
Alberto
Muy bello tu homenaje, Cristina. Un ayuda memoria para que no olvidemos nunca el precio que pagamos con sangre joven por esa irracional guerra.
Un beso grande
María Rosa León
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