Poema de Rubén Derlis
RAYUELA
Saltando a un solo pie –entre los embates
que voy sorteando– ya tirado el tejo,
intento el paraíso prometido
por haber habitado en el infierno.
Cada vez se va haciendo más difícil:
de salto en salto el cielo más se acerca
aunque la suerte de llegar peligre
a medida que la distancia crece.
Mas llegaré, pese a que me parezca
cosa imposible de abordar la meta
si sumo los escollos del camino.
Para vivir hay que poner la vida;
en el momento de arriesgar: confianza.
Si jugué a la verdad tocaré el cielo.
© Rubén Derlis
2 Comments:
La frontalidad, ser genuinos, humanos de seguro todo nos llevará al cielo.
Buen poema.
Un abrazo Gus.
Me atrajo el título cortazariano, y pese al estilo disímil, no salé defraudado. Juegas bien con nuestro inconsciente infantil. Bravo.
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