8.7.08

Poema de Eduardo Chaves


DESPEDIDA

Ayer le he dicho a la tristeza: “No vuelvas por ahora.
Quiero estar en la aurora que amanece sin tregua
en la línea de luz donde el mundo sueña cada día
nuevos signos
...
nuevas alegorías
.....
y las mismas campanas y azucenas.”
La tristeza me miró desconcertada.
Era la primera vez que oía una palabra
cargada de canciones y acertijos.
Buscó la puerta
cruzó la calle sin volver la espalda
dobló en la esquina que llega hasta la plaza
y desapareció bajo el letrero luminoso
que indica la frontera que separa la paz de la batalla.
Perro breve
....
guardián de los esclavos
dejó un rastro de sombra y de dulce agonía
fue una niebla que busca su escondrijo
en algún corazón deshabitado.
Yo doy por fin un paso hacia la luz

....
salgo a la vida
instrumento templado a toda melodía
....
sin embargo
como el nombre de una mujer en la memoria
.............
algo de la tristeza me queda todavía.

© Eduardo Chaves

6 Comments:

Blogger Gustavo Tisocco said...

Excelente ese salir a la vida pese a algunas tristezas que quedan...
Un abrazo Gus.

8.7.08  
Anonymous Anónimo said...

Eduardo: la despedida es femenino, la memoria también, por eso se juntaron con la tristeza y aún permanecen. Lindo poema, un abrazo Laura Beatriz Chiesa.

8.7.08  
Blogger Migdalia B. Mansilla R. said...

La tristeza ronda, a veces la sacudimos de nuestro ser, pero ella terca y tozuda, regresa ante el alma sensible de quien en cierta manera...la hace compañera.

Bello poema.


Abrazo
Migdalia

8.7.08  
Anonymous Anónimo said...

Hermoso poema querido amigo, y ese final que me encantó, erradicarla?
siente como se rie de nuestra incredulidad...Un abrazo y mi admiración de siempre.

Lily

9.7.08  
Anonymous Anónimo said...

Eduardo, hermoso poema. La tristeza que abre la puerta y se vá sin mirar atrás, y un nacer a la esperanza, un mañana que vendrá.. y algún regreso que abrirá la puerta? Hermoso Eduardo, te felicito,
OLIMPIA BORDES

10.7.08  
Anonymous Anónimo said...

"perro breve guardián de los esclavos" excelente, querido Eduardo. Siempre es un placer leerlo. Gracias
Alicia Perrig

14.7.08  

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