Poema de Luis Calvo
Transmutación
No aquietaremos la pasión en las aguas frutales
ni en los versos triangulares de César Vallejo.
Nos han arrastrado a un extremo vulnerable, a la
/sospecha.
El cebo destroza las vísceras del poema
pero el centro teje y teje la cordura
aunque las locas del diluvio se aseen en verano.
© Luis Calvo
1 Comments:
No aquietar nunca la pasión es el sino del poeta.
Un gran abreazo con mi afecto y admiración, Luis.
María Rosa León
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