Poema de Patricia Díaz Bialet
PADRE (IV)
.............No te asomes de nuevo al abismo
..............................Edna Pozzi
Habrá casa sin témpanos, reparadora amnesia.
Habrá frondosos besos en donde pueda cobijarme de la lluvia.
Habrá padres certeros, alguna cadera que me acune en su orbe.
Habrá hogar sin ausencia, sin enredado fermento de locura.
Habrá entonces otra niña establecida en su hamaca transparente
y entre sus brazos anidará la púrpura mascota.
Nada de historias anómalas, de médula erizada.
Nada de gérmenes melancólicos, de destino apuñalado,
de secuela de ira y su lógica impenetrable.
Dormir ahora.
Dormirse ya.
Todo habrá.
Todo habrá.
(Si tan sólo pudiera perdonarte aunque sea parada sobre el dorso de tu dolor infinito.)
© Patricia Díaz Bialet
Foto: Horacio Farroni
10 Comments:
Patricia: me conmovió tu poema. Cuanta historia detrás de las palabras. Un abrazo. Antonio.
Sugerente, y muy imaginativo.
Saludos
Marta
esa manera tan tuya de llegar con la palabra a lo más profundo de cada ser,que se mimetiza a tu poesía.
gracias patricia por lo que nos brindas,con mis mejores deseos.
victoria
cosquín cba.
Patricia: el infinito deseo y la infinita ensoñación permean este poema, donde la infancia se transfigura en la dimensión de lo que podría haber sido y no en lo que realmente fue. Melancolía pero también rescate, vibración de futuro. Saludos Irene Marks
"...parada sobre el dorso de tu dolor infinito."
¡Que maravilla, Patricia!
Un poema que lleva la marca de la infancia y en una factura excelente.
Aplausos y besos
María Rosa León
Conmovedor. Terriblemente doloroso. Se queda conmigo, en algún lugar.
Abrazos
Alicia Perrig
Patricia, es conmovedor tu poema. Admiro la valentía de compartirlo y te envuelvo en un abrazo cómplice. Alda
Patricia admirada, me conmovió tu poema, el dolor de esa niña, el deseo de perdonar, perdonar para que haya algo nuevo, también tengo poemas a mi padre ausente, tal vez los envíe al blog, a esta casa nuestra, un beso Patri, María Chapp
Patricia,cierro los ojos sobre una línea leida y relída y aun siento tu dolor. Excelente, un abrazo de
Silvia Loustau
David Antonio Sorbille dijo...
Patricia, conmovedor tu poema, como tantas páginas inolvidables de tu obra. Un abrazo.
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