Poema de César Bisso
Lo establecido
En nuestra casa todo es desorden.
Los cepillos de dientes no cuelgan
en sus horquetas de cerámica,
el libro de Montale aspira polvo
al costado de la cama
y mientras tu voz se entibia
entre almohadones
la calle dona un frío despertar.
Este desorden sin pausa
se levanta con nosotros
y azuza miserias pasajeras.
Para enfrentar la rutina
asumimos nuestras tácticas:
te irás susurrando canciones,
me iré a inventar otro idioma.
Y cuando hayamos partido
el perfume de las azaleas
volverá a ordenar la casa.
© César Bisso
1 Comments:
Precioso poema, César. Muy buen ritmo e imágenes que encantan. Como el perfume de las azaleas.
Saludos.
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