27.3.07

Poema de Jorge Hirch


El fuego
consume el papel
y libera la palabra.
En el centro de la hoguera
sonreía Rabi Akiva
ceñido a los rollos de la ley.
En vano los romanos
y su ejército divino
trataron de someter los corazones.
Quemaron la carne,
hicieron cenizas del papel
pero los ideales y las letras

son eternos.

© Jorge Hirch

4 Comments:

Blogger Gustavo Tisocco said...

así es Jorge pueden destruir todo, pero los ideales y las letras no, no pueden...
Un abrazo Gus.

27.3.07  
Anonymous Anónimo said...

La palabra que pervive y sobrevive a cualquier intento de destrucción es la poesía, Jorge. Y la tuya es excelente.
Cariños
María Rosa León

27.3.07  
Anonymous Anónimo said...

El hombre y su historia infunden vida, crean y destruyen. El hombre que destruye, lo hace con el propósito de matar la esperanza del que crea, pero como dice el poeta: los ideales perduran
Cariños,
ME

31.3.07  
Blogger Elisabet Cincotta said...

la palabra y la idea subsisten en el hombre.
Muy bien lo decís
Elisabet

3.4.07  

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