Poema de Alicia Cora Fernández

DOBLE FILO

El doble filo amolado en horas de insomnio,
parte la noche en dos mitades de luna y plata.
El doble filo amolado en horas de angustia,
le parte el cuerpo en dos mitades de luz y sombra.
Sus ojos negros abiertos hacia adentro, pretenden mantener mi mirada
y los brazos están quebrados en un abrazo que no llegó a darme.
La boca, está tapiada para siempre,
con un bocado de tierra negra y seca del camino.
Quiso explicar, envolvía mi razón con una red de mentiras,
acariciaba mi pelo, quería conocer el fondo de mi blusa,
historiaba con un futuro con hijos,
fabulaba tanto…
No me pudo entender, no quiso,
supe de su olvido mucho antes de saber de su traición.
Ya no sufro, el doble filo amolado en solitario,
me dio la paz que necesito,
mi hombre cayó sin remedio del paraíso,
y se hundió en el infierno.
Sé que mañana ya nada será igual,
sé sin dudarlo que estaré preparando mi viaje al infierno compartido.

© ALICIA CORA FERNÁNDEZ