Poema de Osvaldo Norberto Lázaro

DESPOBLANDOME

Hay una acera que asfixia mi caricia en la calle
donde se venden adoquines.
Una grieta que desdobla los quejidos

encarnada en la lluvia que me vence.
Hay un alimento que fortifica
la dulzura
en los sueños
de mi realidad mal merecida.
Un bozal plastificado por la luna
tendido en la terraza
del beso que aun no se seca.
Un trémulo y ciego pájaro blanco
que vuela sin retorno
cantando su réquiem
en mi techo emplumado de resortes.

© Osvaldo Norberto Lázaro