Poema de José Luis Visconti
suelto despacio
y el único sostén del sortilegio
cae
a veces sucede que
puedo estirar los brazos
y no alcanzarlo
entonces vuelvo al comienzo
y avanzo sobre pasos
desconocidos
la mujer del sueño
atraviesa mi pesadilla
y el viento la quiebra
no voy a su encuentro
el líquido llega hasta mí
......... me convierte en rana
......... ahogada en su propio humo
© José Luis Visconti
2 Comments:
José Luis: los sueños suelen ahogarnos en nuestra propia trampa. Un abrazo, Laura Beatriz Chiesa
Excelente poema!!!
Un gusto leerte!
Abrazos
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