Poema de Karina Sacerdote
en el paladar
quedan las palabras sin voces
los gritos impotentes
omite canciones la piel
en el paladar
quedó sin garganta,
murió dormida y ciega
trasmutando intenciones
confesando desarraigos
en el paladar
la voz muda
........ impotente
............... enclaustrada
dolorosa
© Karina Sacerdote
posted by Gustavo Tisocco at 11:18
4 Comments:
A veces nos quedamos sin voz. Una carcel de angustias la reprime. Muy bueno el poema. Un abrazo. Antonio.
Karina, siempre te digo que encontrarte y leerte es toda una fiesta para mì.
Un beso grande
Marìa Rosa Leòn
Y ese grito que no sale y que lastima tanto... Me gustó mucho tu poema. Un abrazo, Alberto
Y no sale y duele y queda dentro en la impotencia.
Muy buen poema
Abrazos
Elisabet
Publicar un comentario
<< Home