Poema de Mónica Palla/Daniel Marino

nada puedes hacer, hombre, carne iluminada,
salvo respirar, latir, cantar, escuchar;
(el silencio encuentra al silencio en el cuerpo desnudo);
nada puedes violentar.

los tuyos eligen y cargan la vida en sus cuerpos.
los tuyos visten y ocultan la semilla agrietada,
el agua y la tierra, la generosa contienda.

tu mirada desnuda. tus manos acarician.
pares y partes, no eres destino, eres hálito
que al campanario da vida.

advierte el ojo el color de tu piel.
imposible conjunción de atardecer y alba.
pares y partes, desnudo, sonriente, desolado, ejecutado.

una línea roja al horizonte ilumina.
una línea roja, un bello instante dilatado,
un círculo de fuego.

pares y partes caminos circulares,
ruinas circulares,
ajenas esperanzas.

© Mónica Palla/Daniel Marino