Poema de María Rosa León
Olvido imperdonable
Por un olvido imperdonable
me quedé en la estación
de mi último viaje.
¡Y me perdí de ir conmigo
a tantas partes!...
Que no me queda más
que esperar a mi regreso
para poder partir.
Claro que nadie me ha dicho,
Todavía, si voy a regresar
y, tampoco, si me voy
a volver a ir.
Voy a seguir esperando
ya que no puedo no esperar.
© María Rosa León
posted by Gustavo Tisocco at 00:49
32 Comments:
Tu poema me sugiere,una vida "vivida" para los demas,asumir responsabilidades como padres,cuando éstas no son manejadas por el criterio o el sentido comun, acaban por quitar tiempo y privilegios que uno merecia,esto sucede tambien con nuestras profeciones o lugares de trabajo,estos factores a veces son ladrones de nuestros derechos,entre otras cosas al esparcimiento y el amor/asi se truncan a veces "viajes que tanto ansiamos"
María rosa.
Lo lei y releí quede encantado con este poema.
"llego tarde a tantas partes que aveces me pierdo hasta de amar"
alguna vez fue escrito...
tu poema me dió esa sensación.
¡Y me perdí de ir conmigo
a tantas partes!...
Que no me queda más
que esperar a mi regreso
para poder partir.
BE-LLI-SI-MOOOOO.
Mi abrazo enorme amiga.
SANTOAMOR
Hermoso poema, con un bello juego de palabras, M.Rosa.
Felicitaciones
Alicia Borgogno
Es cierto, en éste "vaiven" de puerta giratoria, que es la vida, cuántas veces nos postergamos y cedemos espacios preciosos. Pero aún concientes de la incertidumbre, optamos por la esperanza y también por el perdón.
Después de todo, querida María Rosa, el aprendizaje nunca termina. Excelente poema, te felicito!
un gran cariño
Elisa Dejistani
María Rosa, realmente es un olvido imperdonable al que todos estamos expuestos...
Me encantó tu poema
Un abrazo
maria rosa querida, bello tu planteo , ppero reo que muhos nos lo hacemos, llegará el dia o no no lo sabemos , si sabemos que estamos aguardando
te mando un fuerte abrazo amiga en la distancia
maria elena tolosa
Bien María Rosa. Has dicho con mucha belleza lo que todos sentimos alguna vez. Un abrazo. Alda
A veces uno se olvida donde se dejó y espera recordar que no está. Bellísimo poema
besos
Elisabet
Leí lentamente cada verso, me fui identificando con esas vivencias, y pensé: "qué bella forma de decirlo".
Y lo volveré a leer, un tierno abrazo
Betty
Tanta belleza para "contar" este sentimiento que todos, alguna vez, experimentamos. Felicitaciones y gracias.
Alicia Perrig
María Rosa:
Las esperas son una tortura. En uno de mis poemas (que está en esta página), yo digo: "No todos los que esperan pueden esperar". Como verás, tenemos mundos parecidos. Gracvias por tu poesía, hermana...
María Rosa, es hermoso. Siempre hay tiempo para volver, no sé si al camino ansiado pero en alguna estación al sentarnos en un banco vamos a ver que llega el tren de nuestro destino. Besos de Alicora.
Olvido imperdonalbe y espera inevitable, pero ya estas regresando, en el mismo poema, del "último viaje" de la primera estrofa, pasa a un "todavìa", más esperazador, de la anteúltima.
Un beso María Rosa.
Luis
Una Penélope a la espera de ese viaje ansiado y "olvidado"... pero con el halo de esperanza de escuchar la bocina del tren!! Que asi sea!
Me encantó tu poema, Maria Rosa.
Un enorme cariño.
Mirna Celis.
M. Rosa:
Eres una gran poetisa. Tu poema es precioso.
Incides en la incertudumbre de la vida, en la pérdida del tren y ese final de la espera: "Voy a seguir esperando
ya que no puedo no esperar" que es magnífico.
Saludos, Camilo
Un juego encantador sobre esperas, viajes y llegadas que nos plantea la vida y que el poema lo presenta en forma deliciosa, aunque profunda.
Cariños, María Rosa.
MARITA RAGOZZA
Un juego lleno de inteligencia y un final que desespera. Abrazo. C. Carbone
Nunca hay un último viaje, si quedan, todavía, estaciones por conocer. Bello poema, un abrazo
¿Qué puedo decir que no te hayan dicho?
Poema absolutamente maravilloso.
Un abrazo y mi admiración.
Alicia Márquez
María Rosa: estas idas y venidas, el perderse, el no querer partir,tienen varias lecturas, y son de una nostalgia impresionante y una búsqueda de los momentos irrecuperables.También la búsqueda de una zona donde todo es recuperrable: la pesía. ¡Hermoso!Irene Marks
María Rosa
Estoy encantado por este genial proceso de ida y vuelta, de viaje inmóvil, de salir sin entrar y de volver sin partir que has creado. Talentosa y muy inteligente. Felicitaciones. Eduareo Chaves
¡Gracias por sus invalorables palabras, queridos amigos poetas!
Gracias Juan Carrizo, J. R. Sagardía, a las tres Alicias: Borgoño, Fernández y Márquez, Bettina Dejistani, Claudia Isabel, Ma. Elena Tolosa, Alda, Eli Cincotta, Betty, Sebastián Olaso, Luis García, Mirna, Camilo, Marita, C.Carbone, Fabiana, Irene Marks y Eduardo Chaves. Les mando un beso grande a todos con mi gratitud y afecto de siempre.
María Rosa León
David Antonio Sorbille dijo...
Querida Maria Rosa: tu poema brilla con la sutileza y singularidad acostumbrada.
¡María Rosa! excelente jugando con el absurdo y el desconcierto. Bravo.
Este poema es una pequeña joya, María Rosa; las paradojas, a la manera de Chesterton, son muy estimulantes. Te felicito.
Mariano Shifman
Inteligencia y belleza en una metáfora acerca del no vivir. Estupendo poema.
Yo (Estrella-Roldán)
Poema bello con el movimiento de los olvidos ,con el deseo de un encuentro ...
abrazos
“Claro que nadie me ha dicho,
Todavía, si voy a regresar
y, tampoco, si me voy
a volver a ir”
María Rosa, esta frase, lo resume todo; son plabras mágicas llenas de la sabiduría que te caractiza; gracias por entregarlas para deleite de todos.
El mensaje, es enorme y bella profundidad.
Un gran abrazo.
Sonia
¡Cuántos andenes! ¡Cuántos trenes!
...y la vida allí en la espera.
Hermoso poema María Rosa, hermoso y nostálgico.
Besos,
Migdalia
Impresionante. Sensaciones muy sentidas.
"Y me perdí de ir conmigo a tantas partes"...
frase espectacular, en el preciso lugar y tiempo en que el poema ya conmueve, genera nostalgias, yo diría que al leer este trabajo la pantalla vibra, porque el poema late.
Felicitaciones María Rosa!
Cristian Gentile
María Rosa: siempre tu corazón adelantándose a tus sueños. Gracias por estar. Un abrazo grande. Antonio.
¡Gracias Antonio, Cristian, David, Migdalia, sonia, Estrella, Roldán, Mariano y Ricardo!
Gracias por su afecto y sus palabras.
María Rosa León
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