Poema de Gabriel Impaglione
Al niño de Tegucigalpa
Hecho de tres tallitos
de jazmín y tres costillas,
nudito de sol en mitad de calle,
puñadito de ojos
hondos de Honduras que padece
que lucha y se renace
ese niño
................ resplandece.
Alrededor armados
de niebla los verdugos
y su negra
tiniebla alrededor y adentro,
no saben si matar
o disolverse en luz
hasta morir sin gloria.
- al niño que vi en una fotografía, sacando pecho, desnudo, frente a varios militares.
©Gabriel Impaglione
14 Comments:
Querido Gabriel: ese "puñadito de ojos/hondos de Honduras" conmueve como expresión de la indefensión y la fragilidad humana ante "Los verdugos y su negra tiniebla", problema esencial de la humanidad que hasta ahora no ha sido resuelto: la crueldad y el ansia de poder. Mientras eso no se modifique no se podrá hablar de progreso. Me conmovió tu poema Irene Marks
Gabriel
conmueve la realidad tan cruda y tan bien logrado el poema.Saludos
Anahí duzevich Bezoz
Fuerte, emotivo sin pausa!! gracias!!
Has logrado una obra de arte,al margen del mensaje muy doloroso por cierto
Gabriel, lograda manera de hacer sentir esas dos caras de la moneda, a veces tan contradictorias y no complementarias, las víctimas de los que hacen la paz con la guerra.
Muy bueno!!!
Un gran cariño.
Mirna Celis.
Gabriel:
Tu poema tiene la hondura que encarna la belleza... resplandece como este niño, dándole luz al mundo que pide la paz...
Gracias,
Montse Bertrán
Tu poema muestra la realidad y el dolor en sí. Al se un poema, todo es más profundo tu mirar.
un abrazo amigo
Esa ternura, esa vulnerabilidad, ante el horror de sinrazón que sólo se puede imponer con armas.
Me dolió. Muy sensible el poema. Te felicito por la fidelidad e insistencia a tus ideas.
MARITA RAGOZZA
Hermosa poesía!!. Maravillosa la elección de la fotografía, también. Me conmovió la ternura de tu pintura de ese "nudito de sol". Me quedé pensando cómo vive quien porta tanta negra tiniebla sobre sus hombros, qué marca queda tras apretar el gatillo y borrar ese nudito de luz.Tema complejo, para seguir pensando. Un abrazo.
Los verdugos armados de niebla frente a la inocencia de un niño que también clama por libertad y justicia y paz...
¡Me conmovió hasta las lágrimas tu poema, Gabriel!
Te felicito por tu arte y por tu compromiso con la defensa de la dignidad de los pueblos.
Un gran abrazo
María Rosa León
puñadito lleno de gracia^^^
búhamente^^^
m.e.
tu poema es la cruda realidad de muchos niños desamparados por gobiernos tiranos, muy bien por mostrarlo al mundo una vez mas.
patricia corrales
hermoso poema gabriel,
y así es la poesía que lo abarca todo y admiro la capacidad que tienes desde ese dolor,que muchos sentimos, puedas crear algo bello
no es fácil.
cariños y felicitaciones .
seguimos con honduras.
victoria servidio.
Tu presencia, Gabriel. Como un rayo de sol. Como un hálito de luna. Como la mejor palabra, la única posible. ¡Como lo que es! ¡Un fuerte abrazo!
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