Poema de Gerardo Lewin

Superman sufre

.........Canto las cuitas de un varón preclaro,

.........insigne hijo de una casta ilustre.

........El de acerado pecho, ingnífera visión,

........Kal-El, protector de mundos.

Lo que gélido sopla: odio.

Aquí arrumbé
los males derrotados
de universos distintos, enemigos, distantes.
Vestigios tercos de otra luz.
¿qué andarían buscando?
¿la onomatopeya final?

Antiguos miedos apelmazados: mi familia.

Olvidé la frase:
“...pues trajiste un dolor
que nunca conocí...”

Löis. Fortaleza, soledad.

Suena el teléfono.
(Hola, soy Superman. No estoy.)
Otra vez Braniac, con su latoso modo
de amargo robot amanerado, verde.
Habla como añorando presencias,
la infancia propia, una amistad.

Qué te impide destruir a los hombres.
- dice su voz en mi cerebro -
Percibir a lo lejos sus temores royendo.
Devotos que descubren en el dios
maldad o estupidez:
un personaje azul en la tormenta.

Sobrevolar un mundo roto
cantando himnos marciales
en viejo kriptonés:
Rab gahür na, jalbhouní kal-huma,
Hellëb lyak ünthar, mestheran arrax!

© Gerardo Lewin