Poema de María Eugenia Caseiro
Frío
La noche cenicienta y uniforme
es un cadáver de manos olvidadas,
la más revuelta lentitud pasa de largo
y alguien sostiene, muy despacio,
el soplo que vuela sin palabra.
El grito ya no llueve y la ciudad
se duerme donde no hay intrusos...
los mudos sauces crecen
.. la música de siempre
.. la nieve de los pasos
aún no despierta el aire
sin prisa por llegar
ya mustio el brillo
.. las formas acallando
.. las cumbres al rasgarse
los ojos tienen frío.
© María Eugenia Caseiro
8 Comments:
y ese frío se percibe como el dolor más grande...
Un bello poema.
Un abrazo Gus.
El soplo que vuela sin palabras. Qué lindo frase y el poema todo, aunque transmita un inquietante frío...
Liliana Chavez
El frío parece más intenso en la noche "como un cadáver de manos olvidadas".
Muy bello tu poema, Mariú.
Un beso grande
María Rosa León
Anclo en el soplo de tu poema, y lo transito con la lectura. Me recuerda cuando son míos los ojos que tienen frío.
Arropas el alma, Mariú.
MARITA RAGOZZA
Mariú un poema que deja ese frío no por ello deja de ser bello
aún no despierta el aire
sin prisa por llegar
ya mustio el brillo
las formas acallando
las cumbres al rasgarse
los ojos tienen frío.
Un final cierre perfecto.
besos
Elisabet
Sorprendente poema, pleno de filosofía como los que tú sabes hacer; los ojos tienen frío. Linda figura. Te abraza, Julia desde el Perù
Hermoso poema amiga querida, pletórico de imágenes, con un cierre estupendo, digno de tu maravillosa pluma.
Besos,
Mgdalia
Muy hermoso tu poema
Erika
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