Poema de Marta Zabaleta

Y se nos fue con tono a tardecita y ese olor de madreselvas en flor

......Al bandoneonísta del Sexteto Mayor,
......JOSE LIBERTELLA
......Italia 1933 – Francia 2004

En su envoltura de canto y de silencio
pasó a la abruma desde la escena del alba
adonde triunfan las minas agoreras
y toman el champagne bebiendo un alto.

Y detrás de sus cadencias van los trinos
dibujando la sombra de la tarde:
perdido va con su faja y sin cuchillo,
mostrador, hotelero, compadrito.

Muchacho pendenciero que de chico
se estiró en columpio de conventillo:
bostezando una tarde de pelea
le susurró al patrón que la pebeta...

le puso nota a las mesas y a las piernas
con sus luces al calor de la esperanza
les dibujó figuretes de marchanta
y correteó con la pena trasnochada.

Fue el mismo en el vals que en la cabriola:
lo vi pasar mateando con la suerte,
taita de arrabal le coqueteó a las grelas ,
y le chingó con facón vena a la pampa.

Fue canyengue, de potro y de catrera,
pero miraba entretelones el alumbrado,
regalaba del pago la alborada, y de la mama
traia el chal, el bizcocho, la nostalgia.

Fuiste cansancio del son y de la lluvia,
bien caficho cimbrón de las barriadas,
que le dio a la cadera tiro y lado
y al barrilete lo apresó en la luna.

Fuiste alfalfa, potrero, y puente nuevo,
chiquilín de noches sojuzgadas;
fuiste camdombe del hilo y de las tabas
el tobillo que se enganchó en la parva.

Porque fuiste bandoneón, quien como el tango
sentado en la avenida solitaria
recordara el sonar de mis pisadas
en cada ocho y dos por cuatro de la tarde
he de gritarte:Buenos día, Libertella,
despertate…

© Marta Zabaleta
Foto enviada por la autora del poema