Poema de Edna Pozzi
La niña en el columpio
En cada atardecer
el hombre baja las escaleras de su casa
y se sienta en el parque a esperar las estrellas
En el parque hay una niña columpiándose
y en cada movimiento su cuerpo de cinco años
cubierto con un vestido blanco
traza rayas de luz en el crepúsculo
El hombre ve el resplandor
la finura exacta de la luz
pero sus ojos detenidos en la estrella más lejana
vislumbran la otra niña
la que en Oxipur o Calibán
está balanceándose en un columpio
con un vestido blanco bordado de flores amarillas
Las niñas no se conocen
pero el hombre sabe que el universo
es así de preciso y bello e inútil
Quisiera quedarse en el parque
escuchando el ruido del columpio
pero trepa las escaleras de su casa
donde lo esperan dioses oscuros y pequeños
dioses con olor a pena y a rocío
y a pan recién horneado
y a corazones rotos
© Edna Pozzi
10 Comments:
palabra
sentimiento
hondo silencio
un abrazo
alba
Las niñas del columpio son parte del reloj de la vida, parte del ritmo lento y parejo que no tiene oidos en el desvan de las penas.
Un cariño grande
Gaby Delgado
Hermoso Edna. Como siempre...Alda Salzarulo
Edna,
me queda resonando el cierre, contundente:/"donde lo esperan...dioses con olor a pena y a rocío
y a pan recién horneado
y a corazones rotos"/un final que le da la mano a otro comienzo.
un abrazo entrañable
Elisa Dejistani
Mi respeto, mi admiración, mi aplauso.
La abrazo
Alicia Perrig
Qué belleza, Edna¡ Contundente, conmovedor, exquisito. Gracias. Fabiana León
Edna
Que bello poema esas niñas que se mecen en columpios de los tiempos
besos myrtha
EDNA: ME PARECE FUERTE Y ESPERANZADOR ESE "CADA" ATARDECER DEL HOMBRE A ESPERAR LAS ESTRELLAS. PORQUE EN ESE CADA ESTÁ CADA NIÑA, Y EN CADA NIÑA EL TIEMPO. PERO SIEMPRE... ESA ESPERA DE LA LUZ. TE MANDO UN ABRAZO,
MARÍA PAULA MONES RUIZ
"quisiera quedarse en el parque (...) pero trepa las escaleras"
estar y no estar en el lugar deseado, todo el poema es una maravilla, pero ese espacio atraviesa mi emoción con mayor profundidad. gracias, edna, un abrazo y mi admiración para vos. roxana
En el horizonte lejano se deleitan los ojos con visos de estrellas nuevas y constelaciones brillantes; y esas niñas de azul, amarillo o blanco, disipan el oído con un sentimiento grato.
Que bella visión del universo lejano.
Felicitaciones.
Sonia
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