10.5.09

Poema de Olimpia Bordes


DUERMES

Duermes.
Duermes vestida de princesa
envuelta en encajes y blancura,
detenida en el tiempo.
Hay un río de sombras en tu pelo
que cae displicente
y un rosado matiz en tus mejillas
con aroma de rosas inocentes.
Duermes.
Al mirarte retrocedo al ayer,
a los espacios níveos, al vuelo intermitente,
al viento que cabalga en mi memoria.
Mi piel amanecía en la tersura
de pétalos sedosos,
mi vida era un impulso que asomaba
en ansiosa alborada.
Mis brazos circundaban un refugio,
una cuna, un nido, un abrigo
y brotaban arrullos de mis labios
saturados de besos.
Duermes.
Duermes soñando una añoranza desvalida,
sin retorno a los jardines ilusorios
de aquel cuento de hadas.
Cada día descubríamos el milagro
del amor que se eleva hasta los sueños,
tú, eras tibia paloma palpitante
yo, una fuente de anhelos encantados.
¡Cuántas veces fui caricia enamorada
atrapada en el azul de tu mirada!
¡Cuántas veces te acosté con la ternura
de un maternal instinto!
Duermes.
Duermes vestida de princesa
abrazada a mi infancia, a mi ingenua niñez
a imaginados mundos irreales.
Te miro, tendida en el recuerdo,
con los ojos cerrados,
estática y perfecta,
inmóvil para siempre.
Ya no arrullo tu silencio, no te canto,
no soy cuna, ni abrigo ni refugio,
sólo veo tu encanto desolado
en la fría quietud.
Duermes.
Acaricio tus manos eternamente tersas
y tu rostro de esfinge
impávido y hermoso
y vuelvo a ser la niña que te ama,
y oigo mi voz pequeña que te nombra,
mi muñeca vestida de princesa,
mi muñeca dormida…

© Olimpia Bordes

12 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Y oigo mi pequeña voz que te nombra. Y retroceder a los recuerdos de la infancia, a la muñeca, a la princesa dormida donde dejamos una parte de lo que poseemos. Lindo Olimpia, muy lindo.

Lily Chavez

10.5.09  
Anonymous Anónimo said...

Muy bueno Olimpia...has regresado al tiempo de la inocencia para celebrar un encuentro feliz y fijarlo en la eternidad. Alda Salzarulo

10.5.09  
Blogger zenna said...

bellismo poema, bellisimo en verdad

10.5.09  
Anonymous Anónimo said...

David Antonio Sorbille dijo...
Otra maravillosa expresión de profundo lirismo. Magnífico poema Olimpia. Un gran saludo.

10.5.09  
Blogger ©Claudia Isabel said...

Que lindo que el poema nos permita viajar hacia esos tesoros que guardamos en el recuerdo...esa infancia mágica que a veces no comprendemos porque dejamos de soñar...hay que poder volver siempre a ella...
Excelente!
Un abrazo

14.5.09  
Anonymous Anónimo said...

Querida Olimpia,
plena de nostalgia, asistida por el privilegio de las hadas, nos permites ingresar al mundo de tus fantasías y compartir tus juegos, el arca donde reina tu princesa dormida, que has sabido despertar en este hermoso poema. Te felicito.
Un abrazo entrañable

Elisa Dejistani

15.5.09  
Anonymous Anónimo said...

Olimpia:

Es un bellísimo poema, tiene garra y profundidad.
Esa vivencias infantiles, esa nostalgia incrustada en el alma persisten y viven con nosostros.
Saludos, Camilo

15.5.09  
Anonymous Anónimo said...

Creo que nada puedo agregar a tantos comentarios precisos y conmovedores. Solamente gracias por la nostalgia.Un abrazo.Dragontesa Leuzzi.

15.5.09  
Anonymous Anónimo said...

Si la memoria es sabia almacenando nuestros más tiernos recuerdos, más sabio es el poeta capaz de rescatarlos en la belleza de la palabra. Felicitaciones
Alicia Perrig

16.5.09  
Anonymous Anónimo said...

esa muñeca de la infancia duerme y tu sigues soñando , ella se ha dormido en tu poema y es loque tu expresas al decirlo
un abrazo

maria elena tolosa

17.5.09  
Blogger Juan Carrizo said...

Agradezcamos a Dios Jehová, que nos a creado,con la capacidad o el don de poder manifestarnos en forma poética ,tú mujer aprovechas el dón de manera magistral y lo haces evidente en ésta poesía que merece aplausos

20.5.09  
Anonymous Anónimo said...

OLIMPIA, QUÉ BIEN EXPRESADO TU SENTIR. ESA MUÑECA DE TIEMPO Y EN EL TIEMPO, LA POESÍA HECHA DE MUÑECA Y NIÑA DE AYER Y DE HOY. LA POESÍA NO DUERME, DESPIERTA TE HA GUARDADO UN LUGAR ETERNO JUNTO A TU MUÑECA DORMIDA.UN ABRAZO GRANDE,
MARÍA PAULA MONES RUIZ

20.5.09  

Publicar un comentario

<< Home