10.7.09

Poema de Ana Guillot



se disuelve la nube, se di…suel…ve en trizas flecos del vestido trazos blancos
como tiza blanca bandera de la patria celeste
en las márgenes del río se disuelve, pasa a la clandestinidad la nube
dispersa en fragmentos microscópicos que van y van

no se puede tocar la nube, no se toca la disolución pero se siente su látigo su fleco
se percibe en los órganos, raspa la corteza del pan, del pan del día
comunión que se espera del cielo
un maná prometido, todos los días ha de haber, y es prioritario no alentar mezquindades
cada día ha de haber, pero no siempre hay
esa miga, alimentando al mundo
no siempre hay esa solidez de las palabras esa carnadura del silencio que cala en la textura
y permanece

se di…suel…ve el día, la célula amniótica, la memoria neuronal se disuelve
pasa como una nube ligera que va y va

se hace trizas lo que iba quedando de ese cielo
trizas como tripas hambrientas sin la miga pequeña y saludable
pasa a la clandestinidad lo que ya no alimenta, se tuerce se olvida se deja disolver
pigmentos microscópicos de tiempos que fueron prioritarios

se evade la nube, la memoria del cuerpo, la longitud del rayo, la blancura
somos eso
una evasión de nubes, pan del cielo
una corteza rara y bendecida

© Ana Guillot