17.9.09

Poema de Juan Borges


EL DEMENTE

el demente anda repartiendo gritos por las calles
harapiento repleto de heridas
hijo de la mas puta de todas
bastardo y maldecido
no tuvo enemigos
apenas verdugos
regó con su sangre los nauseabundos rincones de una fabrica
desobedeció patrones
encabezo rebeliones
las torturas lo enmudecieron
escupió el asado de explotadores y entregadores
quiso amar
pero ninguna quiso correr con el por las noches
su piel fue de fuego
y hoy es cenizas
no tiene frío
ni lagrimas
el demente simplemente mira a lo lejos
esas banderas rojas / esos obreros marchando
no sueña con hembras voluptuosas
sabe que son veneno poderoso
sin embargo por las noches cuando consigue dormir
sigue soñando con la revolución...

© Juan Borges

7 Comments:

Blogger ©Claudia Isabel said...

Quizás la revolución es tan utópica como esa hembra, pero lo que está bien claro es que el deseo se queda en estos versos, sin dejar de ser un sueño...
Estos temas te calzan perfecto Juan
Un placer leerte, siempre.
Abrazos

17.9.09  
Anonymous Anónimo said...

bello poema, impotencia miseria humana y un ideal cconfundido en un sueño

un abarazo

maria elena tolosa

17.9.09  
Anonymous Anónimo said...

¿Tendrá razó el que dijo que la revolución es un sueño eterno?
Muy bueno tu poema, Juan.
Aplausos y un gran abrazo
María Rosa León

17.9.09  
Blogger Avesdelcielo said...

Un gran poema donde la encarnación de los ideales hasta el final le deagarran la vida . . .pero sige soñando.
MARITA RAGOZZA

18.9.09  
Anonymous Anónimo said...

Hay pasiones que quedan más allá de todo locura, alguien dice una utopía eterna y sí, alguien dice de versos con un deseo que está ahí y sí....un poema que arrastra con su fuerza, con su fuego. Lindo Juan, muy lindo.

Un abrazo.

Lily Chavez

19.9.09  
Anonymous Anónimo said...

Hola: tu poema sobre el demente es un auténtico alegato, conmovedor hasta la médula. Acaso en esta sociedad los más sensibles sólo puedan convertirse en dementes, al observar las injusticias constantes.Eso se refleja en este poema cuando decía "no tuvo enemigos apenas verdugos".Me conmovió mucho Saludos Irene Marks

20.9.09  
Anonymous Anónimo said...

David Antonio Sorbille dijo...
Una precisa metáfora sobre la realidad y otras cuestiones humanas, demasiada humanas.

2.10.09  

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