Poema de Carlos Adalberto Fernández
Corrientes sola
Es alta noche. Corrientes está sola.
Me mira. Me acompaña, yo pateando restos.
La luna deambula tras las almenas
De torres que otean inciertos horizontes.
Los pasos suenan con ecos tristes.
Corrientes está sola. Yo voy solo.
Recordamos...
¿Cuantas cosas, Corrientes?
Cuantos sueños, en patrulla utópica,
o en cortejo quebrado
o en columna de rencores.
Luego solos de nuevo, vos y yo,
Recogiendo llantos, remendando heridas,
Rehaciendo promesas.
Caminando.
Vos mirando.
© Carlos Adalberto Fernández
Pintura: Bego Tojo
11 Comments:
Bienvenido Carlos a este sitio que pretende difundir a poetas contemporáneos, mes a mes serás publicado.
Saludos, Gus.
Querido Carlos: ¡Qué alegría verte por aquí! A vos y a tu amada Corrientes sola. Una verdadera alegría. Nos vemos en vivo el martes. Conformate con un abrazo hasata entonces.
Jorge Luis Estrella
No están solos. Se tienen ambos.
Bienvenido a este espacio lleno de palabras, que Gus nos permite a cada uno conocernos y estar unidos por la palabra escrita, por la poesía misma.
un abrazo
me ha tocado caminarla y que ella me mire también!
Bienvenido!
Claudia Isabel
Acompañándose en la tristeza y alegría
abrazo de tu tierra
buen poema
desde graciela
conozco Corrientes, pero a un argentino sus calles las llevan con ellos; eso te pasa con todo tu corazón, Julia
Sin duda tus palabras pueden recoger llantos, remendar heridas y rehacer promesas, Carlos.
Felicitaciones y un gran abrazo
María Rosa León
Carlos, qué bueno verte aquí y nada menos que con este poema.
besos
Elisabet
Carlos Adalberto, pese a que sabía que estabas hablando de tu tierra correntina, se me hacía que hablabas de la porteña avenida, en este "tango"... ¿Cuántas cosas nos unen a través de la palabra? Sea un blues, un tango o un buen chamamé... hermoso.
algun dia conocere corriente, tal vez entonces no este sola.
Maria
Dicen que Corrientes es una calle, o una avenida, que cruza, como una rajadura, la Capital Federal. O una orgullosa provincia alumbrando caminos de la Argentina.
Pero Corrientes -mi Corrientes- es como una Vía Láctea, atravesando la galaxia, pero alimentada a café, grapa, vino, libros, chantas, sueños. Dicen que nunca duerme, y ds verdad. Las utopías no duermen.
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