Poema de Juan Lucas Pantaleón Andrín
abrazo
........................... A mi viejo querido
era una tarde como cualquiera
lo vi desde la ventana/ cansado/ en bicicleta/
enchastrada la ropa de mariposas/
pasó silenciosamente para no despertar a dios
la casa olía a cebolla pero él olfateó un guiso de flores
se sentó a la mesa quebró un tierno pedazo de pan con sus manos de piedra/ fue como ver
a una montaña ir a parar contra la patita de una mosca//
en esa tarde como cualquiera escuché como le crecían los años
y las campanas en la casa llamaban a todos despertar/
tierno hasta la violencia/ de martillazos y martillazos
dio sobre mis libros su espalda encorvada//
y nada nunca pudo quitarle las fuerzas
porque el nunca no le llega ni a la nuca/
porque el nunca no llena la heladera/
y el siempre es un diente fijo en la mañana/ mañanas de pan y manteca
que no le quitaron la fuerza nunca /
cuando cierra la puerta y se va
galopan mil caballos/ lo vi esa tarde que no resultó como cualquiera
porque esa tarde lo abrasé para siempre
porque en esa tarde comprendí quien son los valientes.
© Juan Lucas Pantaleón Andrín
3 Comments:
Muy tierna y conmovedora evocación, Juan.
Felicitaciones y un gran abrazo
María Rosa León
Conmovedor, profundamente bello. Felicitaciones. Fabiana León
¡Perfecto! ¡Excelente!
Si quieres publicar en Gaceta Virtual no tienes más que comunicarte conmigo en gacetaliterariavirtual@gmail.com
Gracias
Publicar un comentario
<< Home