Poema de Fabiana Posse

Retiro el alma.
Te dejo el instante.
Que te alimente el aire.
Una libélula sin alas es solo un insecto.
Y yo se cantar solo en el mar.
Se ha hecho tarde, alguien me espera.
Un cuerpo parecido al mío que escribe cosas parecidas a las mías.
Un fantasma que lleva mi nombre no cesa de llamarme.
Tiene abstinencia y se retuerce en espasmos de mi ausencia.
Le llevo mi alma…
Para futuros combates.

© Fabiposse