Poema de Martín Jiménez Guerra
Lo que queda de mí
El efecto lateral de extrañarte
se acurruca entre el vacío a mi izquierda
y lo que queda de mí del otro lado.
En cada luna me analiza con su mirada
verde, brillante, insidiosa
y cree derrumbar aquel muro de nubes
que creció como una rosa huérfana de manos.
A veces siento el viento de tu voz
dándole oxígeno a mis sueños.
Otras tantas abrazo tu ausencia
como aquella hoja que se aferra a la vida
para luego suicidarse en Otoño.
La ironía de la última metáfora me hace gracia,
entonces lloro.
Es imposible esquivar los recuerdos,
matar al olvido
y enterrarte de mi memoria.
Es absurdo querer hacerlo.
© Martín Jiménez Guerra
6 Comments:
Marín, mi aplausoooooooo, te sigo aplaudiéndo!
Besosssssss
emotivo y profundo. Un abrazo Martin.
"...como una rosa huérfana de manos..." Bellísimas tus imágenes y bellísimo tu poema, Martín.
Aplausos y un gran abrazo
María Rosa León
Cuánto amor y tan sentido!! Como pocos.
Un cariño
un poema lleno de honestidad, me encantó. Gracias!
"...creció como una rosa huérfana de manos". Me gustó
Abrazo
Alicia Perrig
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