Poema de Camilo Valverde Mudarra
PALOMAS EN LA BASÍLICA
Las palomas vuelan y ríen,
suben y bajan,
arrullan y aman;
nunca olvidan la Basílica,
en la vidrieras cantan maitines.
No hilan, ni siembran, ni recolectan.
Siempre su mesa está bien puesta
del maná de las bodas
y de las manitas infantiles.
Siempre su vestido, planchado y limpio,
Siempre el aire, sin atascos, provisto,
Siempre tienen su nido,
sus hijos en casa
y su cornisa llana.
Rezan a solas en su intimidad.
No saben de patrias,
de lenguas ni naciones,
su frontera es la brisa
y la amistad.
No indagan amores interpuestos.
No se cansan de sus hijos
ni los enseñan a comer,
simplemente picotean con habilidad.
No ponen un pico a este
y otro a aquel.
No discuten por molestias del vecino.
No hablan del frío ni del calor.
No llaman por teléfono.
No tienen deneí, ni seguridad social.
No les duele la cabeza
ni van a la tienda.
Se contentan con su trabajo y su sol.
Les basta su amanecer y su anochecer.
Viven alegres su rama verde
y toman su agua sin más sabor
que la pureza natural.
Son amigas, se visitan, se cantan,
se hablan y se arrullan;
y saludan al viento y a la lluvia
y aplauden el alba y el crepúsculo.
Si enferman se callan
y olvidan el entierro.
Dejan que los tenues dedos de las nubes
escriban su epitafio
y abran su tumba.
© Camilo Valverde Mudarra
12 Comments:
A no... Éste poema lo voy a llevar a todos lados, qué hermoso, Camilo,detenerse en cada verso y sentir sus plumones tibios y simples.
La imagen es el marco ideal para este poema
Doble abrazo
Betty
Qué maravillosa libertad!
Los versos se encadenan con la suavidad de las plumas." El Padre no les hace faltar nada ".
Felicitaciones, CAmilo.
MARITA RAGOZZA
Camilo: Tu poema me parece un bello canto de elogio de la vida sencilla, esa tan hermosa y a veces tan difícil.
Aplausos y un gran abrazo
María Rosa León
Camilo
Qué bellas imágenes encierran tu poema...los dedos de las nubes...que hermoso
Te felicito
Un abrazo
Graciela Licciardi
Camilo, qué bello canto a la sencillez, a su elocuencia, admirable capacidad de observar expresar lo simple de la vida, aplausos!! Un abrazo, María Chapp
Curiosamente, abro la página me asomo y descubro que los cinco comentarios que figuran son todos femeninos, son todos de unas amables señoras.
A todas ellas, quiero darles las más encendidas gracias por venir y entrar a dejarme sus atentos y valiosos comentarios.
Saludos, Camilo
Otra señora que elogia tu poema, Camilo. Una señora hija de un inmigrante malagueño (él mencionaba precisasmente a Velez Málaga) y que nunca pudo regresar.
Esto de las golondrinas tiene un encanto especial, una ternura que envuelve sutilmente al lector y la sabiduría vestida de sencillez.
Excelente, poeta.
Un abrazo desde el norte de Argentina.
PILAR ROMANO
Y dejan que los poetas hablen de sus vidas sencillas y plenas. Hermosa mirada la tuya y hermosas imágenes.
Camilo
con absoluta belleza has llevado mi corazón a pensar en que los hombres deberíamos ser como esos seres emplumados que disfrutan del aire y de la vida. Es hermoso tu texto. Eduardo Chaves
Sra. Pilar Romano:
Muchas gracias por entrar y dejar su comentario. Tiene connotaciones familiares muy personales.
Me gustaria comunicar con Vd. en privado: ¿Podría facilitarme su E-mail?
¡Qué buen poema a esas palomitas que vemos en las plazas! Me encantó...yo tambiéwn tengo uno a esas pajaritas. Solo te hago una acotación: si cambiaras "hijos"que se repite, por pichones tal vez quedaría mejor...Besos...Any
Ojalá nos semejáramos más a la pura humildad y sencillez de las palomas. Qué buen espejo.
Liliana Reinoso
Publicar un comentario
<< Home