Poema de Eduardo Chaves

ECLIPSE

Aunque tengo la niebla al borde de los labios
.. ya no guardo penurias.
Mis ojos están limpios de secretos augurios
y esta chispa de asombro que cabe en mi mirada
son memorias antiguas
de la dulce inconstancia que tuvo el sobresalto
los adioses sutiles que nos dejó la nieve
......... la seda de un agravio
y el temblor de los besos
de aquél amor que andaba sobre pies de relámpagos.
Hay en mi corazón
silencio de una noche que ha perdido sus astros
la voluntad del musgo sobre el muro sombrío
el ansia que se aleja justo después del llanto
la paciencia infinita de una estatua de mármol.
Puedo decir un nombre
que ha huido con el tiempo
deshojando los libros que una vez fueron santos
y me acompaña el aire de un lejano suspiro
que piensa en mis recuerdos
............ como si fueran pájaros.
Es muy bella esta hora
........... y sin embargo
cae sobre mi alma una última gota
igual que la que queda tras la lluvia
y se esconde sumisa en el fondo de un cántaro.


© Eduardo Chaves