3.6.07

Poema de Patricia González Cerri



La casa

Mi casa enredadera
de flores siempre blancas
la que guardaba un grito en los cimientos
y una fe de ladrillos
donde clavar la ausencia.

Allí se destemplaron los tejados
con música de lluvia,
se encendieron lo cuerpos
y amaneció la infancia de mis hijos.

Yo la sembré de llantos y de estrellas
volviéndola recuerdo
cuando agosto se ensaña en mis orillas
con su aullido de lobo.

Mi casa siempre sola
en la cima del viento.

© Patricia González Cerri
Foto: Patricio Coullery (La casa de mi infancia)

4 Comments:

Blogger Gustavo Tisocco said...

Bienvenida Patricia a este sitio que pretende difundir a poetas contemporáneos.
Sabés que es un gusto, para mí que estés.
Un abrazo Gus.

3.6.07  
Anonymous Anónimo said...

Patricia: Me encantó tu poema con esa evocación tan tierna y tan profunda de la casa de tu infancia, esa "que guardaba un grito en los cimientos"
Un cariño grande
María Rosa León

3.6.07  
Anonymous Anónimo said...

Agosto se ensaña en las orillas de todos, con el mismo aullido.
Bellísimo poema, Patricia.
Osvaldo Rossi

4.6.07  
Anonymous Anónimo said...

Querisa Patricia: esra bella creación entre flores blancas, el gemido tal vez inagotable que subyacerá en los ladrillos de la casa y la entrañable melancolía del amor total, me conmociona una vez más como tantos.
Un abrazo.
Mirta Cevasco

12.6.07  

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