Poema de Alicia Perrig
Desde el norte
se enlutó la mañana
los cerrojos no pudieron
con la avalancha de muerte
por toda la casa
gemían nervaduras
caían cortezas
como hilachas de espuma
una niebla de nudos
desgarraba anillos vacíos
en el rincón de las muñecas
donde tantas veces
las niñas
jugaron a la vida
.......... agonizaban trinos.
© Alicia Perrig
8 Comments:
Y esa muerte de las cosas que nos van embriagando a diario, que nos laceran, que nos oprimen...
Un abrazo enorme Gus.
Bellísimo tu poema, Alicia. Leerte siempre es un placer muy grande.
Con todo mi afecto y admiración
María Rosa León
Magia, mensaje y lenguaje propio, son el sello de tu poesía. Este poema me llevó al lugar donde están presos mis cantos que esperan persistentes la voz que los pronuncie.
Cariños, Alicia.
MARITA RAGOZZA
Una belleza! Cada verso, cada imagen es en sí mismo un poema.
Te felicito, Alicia.
Patricia González Cerri
Alicia: me gustò tanto tu poema...crudamente azul....y en ese final toda la magia y el asombro condensado en el rincòn, ese rincòn de vida con su canto callado, pero canto al fin.Cantemos y que trinen las palabras que nacen y renacen!!! Un abrazo.
Maria Paula Mones Ruiz
Cuántas veces,Ali, reconstruimos nuestra casa interior de múltiples fuegos apelando a la memoria del rincón de la infancia.La vida es eso, un permanente proceso de reconstrucción.¡Gracias,como siempre, por tu poesía!.Tu primera admiradora(literalmente).Beso.Norma
Triste y bello Alicia.
Mi abrazo.
aldo novelli.
Mi mail, te espero:
aldonovelli@yahoo.com
Tan sublime como doloroso.
Excelente poema. Abrazos.
Andrea
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