18.3.08

Poema de Lidia Cristina Carrizo


Una rosa

Rodó una piedra,
se oyó un chasquido,
el agua toda
se estremeció,
cual se estremece
un niño dormido, al que
su madre suave besó.

Se armaron ondas
muy temblorosas,
cual mariposas
tomando sol,
y hasta mi orilla,
llegó una rosa
que tomé yo.

Más al tomarla
con estas manos,
con estas manos
que alguien me dió,
me miró triste
sonriendo muda,
y entre mis
manos ... se deshojó.

© LIDIA C. CARRIZO

7 Comments:

Blogger Gustavo Tisocco said...

Poema que refleja la muerte, lo que perdemos...
Un abrazo Gus.

18.3.08  
Anonymous Anónimo said...

Hermoso poema!! con ritmo, con imágenes, con sensaciones. Un abrazo, Laura.

18.3.08  
Blogger María Rosa León said...

Muy bello tu poema, Lidia. Una bella metáfora de lo efímero de la vida y lo fugaz del amor.
Un beso grande
María Rosa León

19.3.08  
Anonymous Anónimo said...

MI QUERIDA BUENA AMIGA, BIEN VENIDA AL MUNDO DE MI ANGELITO,EL MUNDO DE TISSOCO,UN GRAN HERMANO.

21.3.08  
Blogger Elisabet Cincotta said...

Lo efímero y la angustia ante la pérdida muy bien reflejados en tu poema.
Un gusto leerte. Te agradezco el comentario a mi poema
Elisabet

24.3.08  
Blogger viviana said...

Bellísimo poema que denota la fragilidad de la vida. Un poema pleno de música y belleza.
Viviana Pelle

30.3.08  
Blogger Migdalia B. Mansilla R. said...

Lidia, ¿sabes lo que escuché mientras leía tu poema? Una nana, una nana a la vida.

Besos y siempre es un gusto leerte.

Migdalia

30.3.08  

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