6.3.09

Poema de Isabel Krisch



mortero de un cuarto uno cinco
maniobra silenciosa que genera la acción en la mezcla
un poco de cementocalarenayagua
la pala moldea
la mano es imprescindible
los elementos de a poco entran en contacto
entonces
inmediata irremediable la fusión química espontánea
y sin sugestión .... la temperatura
tras un minuto más un minuto más un minuto
sube
sólo hay que acariciar
la argamasa

© Isabel Krisch

5 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Isabel: un perfecto parangón con el amor."...sólo hay que acariciar la argamasa". Un abrazo, Laura Beatriz Chiesa.

6.3.09  
Anonymous Anónimo said...

"...un minuto más un minuto más un minuto..." Es la medida del tiempo sin tiempo y sin medida, de la poesía,Isabel.
¡Muy bello tu poema. Felicitaciones y un beso grande
María Rosa León

6.3.09  
Anonymous Anónimo said...

Isabel, me gustó mucho el juego o la dualidad que has pintado entre algo tan concreto como es el cmeneto y algo tan abstracto como es el amor. En esa "argamasa" de sentidos, lograste tu objetivo. Un poema vibrante, lúdico y pasionario. Felicitaciones. Marta Ravizzi

9.3.09  
Anonymous Anónimo said...

Isabel has amalgamado muy bien dos elementos con los que construimos la vida, el cemento que lo atribuyo a la casa y el amor para habitarla.
Pocas y profundas palabras
te felicito
besos myrtha

11.3.09  
Blogger LIDIA CARRIZO said...

LA MANO DEL HOMBRE TAN NECESARIA
COMO EN TU POEMA CUANDO EL AMOR
ES TOMADO CON MANOSCARICIASDEELEMENTOS
LIDIA CARRIZO

26.3.09  

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