Poema de Leonor Mauvecin
MI PIEL
........Condenada a mi forma de este mundo
...........................Olga Orozco
Condenada a esta piel, la observo
abrirse lentamente sobre la flor del tiempo.
La desdoblo, para leer en ella su código secreto.
La estiro sobre los cuatro puntos cardinales para enredar los sueños.
No alcanza, es apenas un despojo que encoge y me atrapa.
Como tela de araña
mi piel, oculta un ojo siniestro que mira, más abajo de mí,
mi pobre ropaje que deshoja
mi pobre ropaje con su ritual de fuego.
Condenada a esta piel de barro, de pulpa de maíz o de madera
recorro sus límites y escribo sobre ella.
Trazo el último enigma de la aurora.
Escribo en la fragilidad.
Sobre la arena, con mis huesos. Esperando la última marea
mientras socava el tiempo , me desgrano.
© Leonor Mauvecin
posted by Gustavo Tisocco at 16:33
8 Comments:
Excelente tu poema Leonor "mi piel, oculta un ojo siniestro, que mira más abajo de mi" "felicitaciones"
Excelente poema sobre la fragilidad de la materia, el cuerpo. Pero hay algo más...
Saludos!!
Amalia Abaria
Leonor, más allá de cualquier crítica constructiva que se pueda hacer al texto, creo que es interesante, sobre todo el final en el cuál el tiempo se disgrega, se disuelve, se desgrana, a fin de cuentas, ¿eso sucede con el tiempo verdad? el tiempo es la distancia más grande que nos separa...
Te mando un saludo y adelante, es un texto interesante.
Todo el poema nos reserva la belleza y el sentir de esta estupenda poeta que sos Leonor. Felicitaciones.
Un abrazo.
Lily Chavez
David Antonio Sorbille dijo...
Me asocio a los queridos colegas. Un poema excelente. Te felicito.
¡Ay esa piel que se nos rebela
en una rebelión que no consulta
si queremos o no
que se disgregue!
Gracias gran poeta¡eres genial!¡Tu escrito llega hasta a los huesos!
la piel, la piel... qué difícil es despegarse de las pieles leonor...
una belleza te atrapa al leérlo, frágil y sutíl, que te encanta
mucho, pero mucho me gustó
un beso neorme, gracias
francisco
La piel desde diferentes imágenes, nos cubre, . pero también nos aleja de los otros.
Muy significativo y gran poema.
MARITA RAGOZZA
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