Poema de Carmen Amato
Esta luz,
este resplandor de día especial,
es de esos días que vuelven del pasado
o que nunca se van,
uno de esos días en que todo refulge y reverbera:
la yerba tienen un verde más brillante y la ropa
y en el tendedero un blanco más transparente,
el reflejo se refrena en las ventanas
se detiene atrás de la cortina
pintándola de radiantes sombras.
Estos días son tan plenos, tan incandescentes,
que parecen estar hechos sólo de sol,
iluminan cualquier recuerdo
deslumbran cualquier melancolía
acercan la presencia de los seres amados
.........................................y a los lejanos
se les ama más que nunca.
Más que nunca.
© Carmen Amato
12 Comments:
Deslumbra tu poema de tanta luz que encierra.
Belleza.
Un cariño
Es tan vívida la luz del sol en este poema, que se transmite y se refleja
más allá de las palabras.
Un abrazo,
Juany Rojas
Querida Carmen:
esa fusión de naturaleza y sentimientos que ya es tu estilo, nos enternece de recuerdos compartidos. Un abrazo
susana rozas
Es bueno pararse ante esa luz... y verla.
Besossssss
Un derroche de luz y de belleza en tu poema, Carmen.
Aplausos, bises y besos
María Rosa León
CARMEN:
ES TAN HERMOSO TU POEMA COMO EL DIA QUE LO INSPIRO, Y MAS, PORQUE LE AGREGASTE TU MIRADA Y TUS PALABRAS.
SALUDOS Y UN ABRAZO HOY QUE ANDAS ENTRE DIAS GRISES.
Magdalena Guerrero
Nerina, Juany, Susana, Monica y María Rosa:
Gracias, leer sus comentarios amables y motivadores,
siempre es un estimulo, e imaginarlas a todas bajo la misma luz tambien.
Un abrazo afectuoso para cada una de ustedes.
Carmen Amato
Ayer fue un día así en mi pueblo, y no encontré la manera de decirlo. Gracias por hacerlo!
Carmen
gracias por compartir tanta luz, esos días plenos que solamente pueden verlos los corazones como el tuyo que contienen el brillo de la esperanza y el amor. Dulce poema que me acarició el alma. Eduardo Chaves
Precioso!! convoca una mezcla de Van Gogh con Rimbaud... qué bello!
No solo la palabra resplandece, la foto encandila. Gracias a los dos por tanta luz. Abrazos.
Molly Bic
Carmen querida. Siento que Van Gogh y la alucinante matriz del amarillo tomaron por asalto la esperanza. Bello poema el tuyo. Gracias, Norma Segades
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