Poema de Adriana Maggio
Asincronía
Hubiera sido tan fácil.
Sólo cuestión de tiempo,
de armónico decurso.
Sólo línea y línea
consonantemente encrucijadas.
Te lo digo, tan sencillo…
como castañuelas a punto de deseo,
o latir al compás del que nos ama.
Estar en el lugar cuando es la hora
de estar en el lugar.
Que el reloj te avise
cuándo caerá la estrella.
Isócrono ejercicio de la vida.
Pero no…
Y grazno como un cuervo,
y bramo como búfalo que soy,
como elefante.
Chillo, ladro, rujo,
y zureo
como paloma amenazada.
Y no me alcanzan todas las voces
de los animales que soy,
porque tengo miedo
de no estar
para el instante de mi muerte.
© Adriana Maggio
12 Comments:
Sólo puedo decir APLAUSOS!!! Un temor común en el hombre.
abrazos
Elisabet
Yo también te aplaudo, Adriana, porque este poema tiene fuerza y originalidad, atrapa. La segunda estrofa me pareció de antología.
Jorge Luis Estrella
¡Qué buen poema, Adriana!
Te cuento que yo no temo no estar para el momento de mi muerte. Es más: desearía fervientemente no estar. JAJAJA.
Más aplausos, sumados a los anteriores y un beso muy grande
María Rosa León
Que bueno Adriana!
Cuanta fuerza a la hora de vivir o de morir: la poesia puede con su luz, y puede con su belleza!
Gracias, un abrazo,
Montse Bertran
David Antonio Sorbille dijo...
Genial poema, Adriana. Un abrazo
Adriana
muy bueno el texto, inquietante y doloroso en cada uno de sus versos, la pasión, el amor, la ansiedad y el valor de todas las emociones que componen el corazón.
Eso salvaje que aparece en las referencias animales me encantó y me sacudió el alma. Eduardo Chaves
Aplaudo. Con ganas!!!
Abrazo
Alicia Perrig
La eterna asincronía con que a veces caminamos la vida... Me encantó, me sentí tan identificada Me emocionó tu poema Un abrazo Anamaría
Hola, Adriana: la lucha, que es el vivir, y la percepción lúcida de que hubiera podido haber sincronía, exactitud, falta de conflictos. La característica de tomar el desafío y conscientemente salir a la palestra pese a los inconvenientes, y el miedo humano , y ese otro miedo más propio de quienes son buscadores profundos, el miedo de perder la conciencia, la lucidez , la mirada que comprende. ¡Muy logrado! Irene Marks
Adriana, Cavilo y pienso:
Es como ese temblor que sin ser por felicidad ni miedo, se siente, ante la aceptación de lo inevitable.
Enorme poema.
Va mi abrazo desde el alma.
Querida Adri.
Cómo me llegó tu poema.
Tengo un poema en uno de mis libros que termina:Tengo tanto miedo de no vivir mi muerte.
Aplaudo de pie
desde graciela abrazo
Querida Adriana: vivir la muerte concientemente, un anhelo de tantos, en Oriente muchos viven su vida preparandose para ese momento, para que morir sea un momento de Gran Conciencia del Ser...poema metafísico,de gran hondura!! Besotes, María Chapp
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