Poema de Hernán Tenorio
Principio
El silencio del principio
está siempre en nosotros.
Yo quiero tocar esa esencia
desde mi esencia
o desde el oscuro caos
que sugiere el universo.
La materia, como nombre,
no significa nada;
las cosas son cosas igual
y uno puede decir:
“La noche muere”
o
“Muere la noche”
o
“Noche la muere”
o
“La muere noche”
o (con una metáfora)
“La luna asesina”
o
“Luna la asesina”
o
“Asesina la luna”,
etc.
Quisiera decir otras palabras:
las que nadie ha dicho,
las mías,
las que surgen como caídas de la tierra.
He pensado mucho
y ya no quiero pensar,
sino más bien decir:
“Naftalina”
de cuerpo erguido
sobre el remanso tibio de un otoño.
No, no, no...
La paciencia ha surgido del miedo
al “Virrey Arredondo”,
de la melancolía de estar de pie
sobre el cráter empedernido en vicio.
Noche que no descansas,
descálzate ante mí
como pájaros que iluminan el firmamento inoportuno,
en insípido de las nomenclaturas:
deícticos engranajes lógicos
que llenan las mañanas de compromisos.
Mis ojos no pueden ver otra cosa más que...
estructuras por llenar:
una manzana en la cabeza
que suturo en una flecha mal nacida.
¡Qué manjar!, ¡Qué manjar!
Es la existencia toda,
la que invade el paladar
de una repugnancia atroz
que hay que remplazar por
sonidos y conceptos establecidos para esa función.
Propongo una sustancia sin formas,
propongo significantes:
ya sin conceptos,
ya sin sonidos.
Y no me siento culpable,
sólo pienso que las cosas se pierden para invadirme.
© Hernán Tenorio
5 Comments:
Dejarse invadir y ser, simplemente ser...
Buen poema Hernán.
Un abrazo Gus.
Una interesante forma de manifestar la poesía, un besito, Ana C.
Esto es poesía en la superficie!!
Alabado seas!
Ricardo p.
quede extenuada!!! hermoso hernan!!. soy el 16767
extenuada asi quede!! hermoso hernan. soy el 16767
Publicar un comentario
<< Home