13.2.09

Poema de Myrtha Milella


MANOS

Las manos de mi niña
eran suaves
como la brisa
que atisba la luna.
Eran expresivas
de palabras que volaban
cuando las soltaba
en señal de caricias.
Sus manos pintadas de risas
abiertas
en busca de ramas
a posar en ellas su ternura.
Un enero ardiente
estrujó sus sueños
los míos…
arrugando en ellas
un pañuelo lleno de lágrimas.
Las manos de mi niña
dormida
cruzadas en silencio
se volvieron paloma
para ser eternamente alas

© myrtha milella

5 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Myrtha: bello poema dentro de la gran tristeza que nos acerca. Un abrazo, Laura Beatriz Chiesa.

14.2.09  
Blogger Elisabet Cincotta said...

Myr, un poema recuerdo de una madre que tiene a su niña más allá del recuerdo

besos
Elisabet

14.2.09  
Blogger LIDIA CARRIZO said...

quedan de sus manos todo lo que ha sabido dar ... todo!
otras manos se van vacìas!
nada dejan.

Lidia Carrizo

16.2.09  
Anonymous Anónimo said...

Gracias Beatíz Eli, Lidia por comentar Manros
Gracias Gus por publicarlo.
besos myrtha

17.2.09  
Blogger Unknown said...

Ternura, nostalgia y pena, en el camino de ser madre. Abrazos Myr, Julia

28.2.09  

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