Poema de Mónica González Velázquez
Mi mano será su ancla
cuando las aguas desborden.
Mi voz será su guía
cuando emprenda el viaje de oscuridad y silencio.
Mi sombra será su sombra
cuando el sol no brille, ni cerca ni lejos.
Mis brazos serán los suyos
cuando las manos graviten.
Mis piernas serán las suyas
cuando huya del espanto.
Mi nombre escuchará
cuando pierda el control
y el switch desate la electricidad en su espalda.
Y cuando la nube azul instale su reino
en días de aparente sosiego
mi cordura será la suya
cuando no entienda
que yo, soy su reflejo.
© Mónica González Velázquez
8 Comments:
Ese amor visto en el otro como en un espejo.
Bello.
un abrazo
Ah, de ese Dios que nos habita.
Sensiblemente, fanny
Axial...el espacio tiempo de nuestro ser.
Un saludo,Mónica,desde el árbol que soy.José Enrique Ramírez
El amor que se espeja en el ser amado en un momento unitivo y único...
¡Muy bello tu poema, Mónica!
Aplausos y besos
María Rosa León
Este es un poema que habla de la epilepsia. Pero también habla de amor, de amor a la vida... gracias por sus opiniones. Un abrazo desde México, D.F.
Este es un poema que habla de epilepsia, pero tambièn es un acto de amor ante la vida...
Gracias por sus comentarios.
Un abrazo desde México, DF.
este es un poema que habla de epilepsia, pero también del amor a la vida.
Un abrazo. Mónica González V
La búsqueda por entender la extraña cohabitación entre esas dos paradójicas partes que a veces somos incluso sin desearlo... Una bella manera de abordarlo... Felicidades Moni...
Publicar un comentario
<< Home