8.11.07

Poema de José Antonio Cedrón


Carta a casa

Ayer pensé o soñé que estaba en casa
Y te pensé o soñé como eras hace mucho
bajo un cielo que era también como hace mucho
esas cosas de hombre de niño que uno tiene.
Te soñé como eras cuando yo no era éste
y te pensé después,
y anduviste girando en mi cabeza
durante todo el día.
Esta mesa es tan chica
acá se desayunan con su ruido de jarros
las mínimas tormentas
acá llueve seguido y las noches largas
se llenan de tazas negras.
A veces alguien canta
para desocuparse de las lágrimas
y a veces hay un ruido de final que me roba
las pocas herramientas que reuní de a poco
esa pequeña historia asomada en desorden
al reloj de la casa
los gajos que juntabas por los alrededores
donde ha subido el polvo.
Injusto es este otoño obligando a cubrirnos
con las hojas que caen de esta miseria
que se pone a crecer
como el tiempo en las fotos amarillas
como las uñas.

© José Antonio Cedrón

6 Comments:

Blogger Gustavo Tisocco said...

Poema donde la melancolía se torna magia...
Un abrazo Gus.

8.11.07  
Blogger María Rosa León said...

¡Qué bella evocación de un tiempo que pasó y que vuelve en los recuerdos, en las fotos y en tu excelente discurso poético, José.
Un cariño grande
María Rosa León

8.11.07  
Anonymous Anónimo said...

Nos desayunamos con jarros y hay temporada de lluvias en México, es tan nostalgico como Buenos Aires.

Abrazo
Martha

18.7.08  
Anonymous Anónimo said...

En los pueblos de México ee desayunan con jarros y hay temporada de lluvias, nostalgico como Buenos Aires.
Un abrazo
Martha

18.7.08  
Anonymous Anónimo said...

Pocos discuros poéticos del exilio tienen la profundidad y calidez de este "cuate".
Saudades por Cedrón, internacional y también chilango. Un beso, Claudia (de Coyoacán, Méx)

27.8.08  
Anonymous Anónimo said...

Feliz encuntro con tu poesía, José. Admiración y muchos recuerdos, Magda (del veracruzano café La Glorieta)

29.8.08  

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