Poema de Graciela Licciardi
un cigarrillo despunta la noche
y hay gatos que orinan la nostalgia
la barra de la esquina
compite con los grillos
rompe el espacio de una huella
que deja joven al futuro
los muchachos emborrachan el tiempo
ríen lágrimas de sórdidas anécdotas
el sol les canta sus grillos encendidos
las colillas de puchos
y esqueletos de botellas
ahora son muchedumbre
en la vereda
© Graciela Licciardi
8 Comments:
Graciela: pintás con gran fidelidad en las pinceladas el ambiente de un barrio y las llamadas "patotas" de la esquina. Muy logrado, por la síntesis y la exactitud en la transmisión. Saludos poéticos Irene Marks
Muchedumbre que hacés poema.
!muy bueno!
Besossssssssssss
Graciela
gracias por el poema.
Y gracias por lo compartido en ALEGRIA.
Abrazo JORGE PAOLANTONIO
Una pintura exacta de la vida en los confines del barrio. Sólo quedan en la vereda los restos de algo parecido a las hilachas de corazones muertos. Felicitaciones Graciela, un beso de Alicia Cora.
Graciela... las imágenes, las hilachas..., tu poema desnuda las veredas que dejaron de albergar el encuentro a través del corazón. Tu poema expresa mucho del ahora. Sobre esas hilachas..., aunque parezca vano, pongo luz para emerger. Abrazo. Cecilia Glanzmann
David Antonio Sorbille dijo...
Una verdadera pintura. Realismo puro con la magia de la poesía. Un abrazo.
Una valiente e inteligente postal humana, con el calor de tu voz poética, Graciela.
Aplausos y besos
María Rosa León
Grace; esta es otra de tus pinturas; no sé por qué me la imagino con música ciudadana y ese par de bailarines que vimos la otra vez.
Podría ser?
Besos
Gra
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