Poema de Alicia Márquez
“He cometido el peor de los pecados que un hombre puede cometer:
no he sido feliz”.
Jorge Luis Borges
LOS SUICIDAS
Insisten.
Acumulan dolores,
pero insisten.
Quieren juntar pedazos de lo que ya no.
De lo que alguna vez.
Tercos,
arman perfectos castillos de arena.
Inventan estrategias
y pegan con plasticola
corazones que laten a otro ritmo.
Sueñan con voces lejanas que antes.
Se hunden en ciénagas de reproches
contra sí mismos.
Alimentan cocodrilos
con sus propias tripas.
Quieren salvar al viento
con las manos,
se pegan un tiro
con flores secas,
se tiran de cabeza al agua
de los espejos rotos,
se cortan las venas
con cartas amarillas,
se envenenan con gotas de recuerdos.
Se van volviendo de un gris transparente
ciegos frente a lo inevitable,
sordos a las evidencias.
Quizá, el problema consista
en que la felicidad posible
es tan lejana como aquella que alguna vez alcanzaron.
Pero siempre
vale la pena estirar la mano.
Aunque ellos insisten
en chapotear en las cloacas.
Y todos los días se suicidan mansamente.
© Alicia Márquez
18 Comments:
Las vidas que se van sin saberlo
es como evadir esa realidad que suicida el instante y todo es hacia el vacío o la esperanza del devenir que lo salve. quién es el tiempo?...
un poema que el sucesivo suceder
confunde esa verdad... real
si la vida es tan corta!... como dice el poeta!
gracias me gusto ese decir de la vida
LIDIACC.
Muy interesante
saludos
Marta
Alicia: me habla de los suicidas, o de los poetas? (esos tercos que pegan con plasticola corazones y voces lejanas mientras intentan salvar a los vientos y se transparentan grises en los espejos rotos...)
Bellísimo!
Un poema que deja pensando,pues tiene varias lecturas.Cada uno de nosotros puede tb. ser un suicida,ya que cada noche es como un morir, sin embargo,deseamos volver al diá siguiente,para nuevamente "suicidarnos mansamente.
Un abrazo,
Juany Rojas
David Antonio Sorbille dijo...
Un poema muy elocuente y preciso sobre esa mortífera insistencia de negarse a la vida. Un abrazo, Alicia.
Alicia: CAsi puedo leer un dejo de esperanza en es "Pero vale la pena estirar la mano..."
Y creo que como poeta todos renacemos cada día en cada verso.
Aplausos, besos y bises
María Rosa León
Varias interpretaciones, un abanico de palabras que se abre y van cayendo en los sacos que esperan ver caer algo. Un abrazo Alicia, siempre mostrando diversidad. Muy bueno.
Lily Chavez
Alicia, qué maravilloso tu poema, hasta terapéutico diría yo. Un grito para despertarlos de ese suicidio a cuentagotas.
Un abrazo.
Alicia, tu poema es de esos que provoca la reflexión. Cada día nos trae un suicidio nuevo; el amor, el desamor, la vida, los sueños, la libertad misma, la caricia, los pequeños odios cotidianos... todo es suicidio al que abocamos la palabra... ¿Yo? Bueno, yo me dispararé un girasol entre los ojos.
José Manuel Solá
[Puerto Rico]
Quién no pensó en morir para no sufrir más? Pero el poeta puede estirar la mano y escribir un poema que lo salva de la muerte... y nos suicidamos cada noche, pero siempre encontramos el poema que nos salva. Terrible pero cierto, tu bello poema.
Celina
Alicia
profunda mirada hacia estos suicidas que tal vez sean soñadores que sueñan con el poema. En la cornisa se alcanza un lugar distinto para ver la vida, algunos comprenden y realizan el salto pero hacia el alma pura, la materia secreta de la poesía. Eduardo Chaves
Elocuencia, dicen, maravilla, terapéutico... yo hablaría de magia.
Un beso admirado.
Brillante, Alicia. Tu poesía siempre tan punzante y exacta.
abrazos
Elisabet
"pero vale la pena estirar la mano, aunque todos los días se suiciden mansamente"
encontrar la felicidad tan lejana nos hace buscarnos a nosotros mismo todos los días.
un poema para reflexionar
un abrazo
Silvana Merlo
ya cargué mis flores secas...
Un abrazo.
Fuerte y movilizador. Usaste unas figuras preciosas. Me encantó. Un abrazo.
¡Gracias a todos por los comentarios!
Un abrazo,
Alicia Márquez
¿Existe la belleza terrible?
Gran poeta
Abrazo
Alicia Perrig
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