15.8.10

Poema de Carmen Amato



CIUDAD SITIADA

En la ciudad de mi infancia

quedaron los dulces años,
mi adolescencia atravesó sus calles
sin temor ni sobresalto.
La juventud fijó espacios
entrañables, construyó en despoblado.
Aquí ejercí mi profesión,
aquí cuajaron mis afanes,
luego, llegó el tiempo de horror:
la muerte de mujeres, las cruces rosadas
en baldíos, la mirada del mundo
sobre Juárez. Los puentes anchos se volvieron ínfimos
contactos, abismo abierto, muro levantado,
territorio en disputa entre ejército,
habitantes y capos.
La ciudad de mi infancia,
ahora ciudad sitiada
se desangra,
retenes, militares, metralletas y tanques,
todo un campo semántico,
campo minado,
campo Marte,
campo santo,
campo abierto, campo
cuyas flores van muriendo
sin reparo. Mala yerba
que se enraíza
sin jardinero que la arranque.

© Carmen Amato

4 Comments:

Anonymous Anónimo said...

un monton de recuerdos volviendo al presente, añorando todo lo que fué


maria elena tolosa

16.8.10  
Anonymous Anónimo said...

Todos los campos posibles... Muy bueno tu poema, Carmen.
Felicitaciones y un beso grande
María Rosa León

16.8.10  
Anonymous Anónimo said...

Carmen gracias por recordarnos esos campos que en la voragine de la vida vamos olvidando. Un saludo fraterno. Irma del Angel

20.8.10  
Blogger Adriana said...

Excelente y estremecedor poema. Sus imágenes son golpes en plena conciencia. Un hallazgo, eso de "campo semántico". Muchas gracias. Un abrazo. Adriana Maggio

21.8.10  

Publicar un comentario

<< Home