30.12.06
29.12.06
Poema de Silvia Mazar
22.12.06
Prosa de Yadi Henao
He olvidado el domicilio de su abrazo. Perdí un pañuelo dormido en el silencio.
En las baldosas del hospital una muerte recibe los primeros auxilios. No quiero darle respiración boca a boca; no quiero atar sus venas a una cama de paz. Quiero dejarla ahí, contra el piso. Y no mirar, no mirar el cuerno de la desolación.
© Yadi Henao
Poema de Marita Miranda
de huracanes ojos varios
empoderaron arterias
y el cerebro, la orden dio
a mano de la pólvora
que apresuró despedida
apuntó a su blanco móvil
y tan solo un estampido
ventajas dio a la indeseable
geranios a borbotones
enrojecieron la acera
desguases muy de temprano
sin sentido y sin por qué
cada barrio en cada día
de plomo viste el destino
sin sentido, sin por qué
© Marita Miranda
Poema de Graciela Zolezzi Faure
GOZO DE VIVIR
Estallido callado en la ternura
Puños golpeando nuestras pieles
Gotas de lluvia mansa
………………….. en ventanas de recuerdos
Arreboles de amanecer
………………….. en este crepúsculo
………………….. dando ilusión a los ensueños
toda yo
………. tan ser humano
en esta vida
………. de los viejos sitios
………. del adiós final
………. de la partida
toda yo viva
……… siempreviva
……… tozudamente viva
en el ansia
………. la plenitud
…………. la alegría.
© Graciela Zolezzi Faure
21.12.06
Poema de Gerardo Lewin
¿Qué busqué aquí?
Busqué una música mayor,
un amplio río.
Ambigüedad. Voces
ahogadas en el limo negro.
Busqué una changa en playas
de estacionamiento. Subterráneas.
¿Por qué no te morís?,
dijeron. Cosan sus ojos,
sellenle la boca.
Denle sutil inexistencia;
crudo, duro vudú de incertidumbre.
Que labure.
Vos ¿sos vivo?
¿Dónde dejaste el auto?
¿Qué pensabas que diría
un muerto, el muñequito
que camina por la sombra?
Yo
no soy
quién.
© Gerardo Lewin
Poema de Viviana Pelle
Un cuerpo hormiga
se perdió detrás del cristal
ya no lo veo y no puedo saber
si atravesó una pared
o tan solo se detuvo
y se mantiene como estatua
Muchos cuerpos hormigas caminan ligero
no se sabe adónde van
y si alguno, quizás, traspasará el espejo.
Ants A body ant was lost behind the crystal no longer I see it and I cannot know if it crossed a wall or so single it stopped and it stays as statue Many bodies ants walk light does not know where they go and if some, perhaps, it will transfer the mirror.
©Viviana F. Pelle
Poema de Daniel Barroso
la singer haciendo música en las polleras
marechal y las camisas abiertas
el rodete rubio y las radionovelas
concubina del general
la de huesitos como mástiles dentro de una botella
la de manos como banderas y ojos de tigra
la de los pobres y los escapularios
la de frazaditas calentando hasta las piedras
odiada por las vacas de la recoleta
santificada en cuadritos de cartón y acuarela
perseguida por bisturís y taxidermias
muñeca rota en las trincheras
diosa del purgatorio y las milicias obreras
perseguida hasta su mueca de cera
meada por maricones con charreteras
abanderada hasta sus ruinas
capullo de su tallo
paso de su huella
luz de su niebla
fustigadora de alcahuetes y santurrones
amanecía en octubre
y en julio se hacía noche
la que ahuyentaba doctores
y amaba enfermeras
la de muerte ninguna
la toda vida huyendo de ella
plenipotenciaria del poder en las veredas
la de verdades sobre la falda
la de balcones como alas
la de volar entre risas y tragedias
chirusita de las afueras
incendiaria de toda agua que no bebiera
costurerita de carriego
fuelle hembra
voz chiquita de las tormentas
la tan joven pobrecita decían las viejas
la tan zorra en tertulias de las anchorena
la tan pálida
la casi sombra
suspendida en alambres la vieron desatar estrellas
© Daniel Barroso
Poema de Isabel Krisch
22
este cuerpo elige ser real
bajo la geometría de un nuevo desafío
se arroja como un pez
abruptamente
el alma está dispuesta
los pechos se cargan de jugos
el mentón de azahares
las papilas conocen la réplica
se anima
para no morir sobre un pétalo
sé que él puede
aunque lo invada una gota de naufragio
cada tanto
aunque esté cansado de cavar y cavar
todavía
desconociendo el dialecto
este cuerpo elige su entelequia
la voracidad
y el beso cardinal
© Isabel Krisch
Poema de Viviana Álvarez
............. Song in F (Déanta)
tal vez acunen vientos las estrellas
que acarician tu frente
y llegue hasta mí el toque de tus manos
en añiles
porque tal vez la noche grite
desde la luna a tu cielo
que no es el mío / mi nombre
desde la mueca del astro y te vuelvas
a las sombras circundantes
y no sean los árboles que musiten
y sea tu alma que quizá me escuche
entre tu piel y la vida
© Viviana Álvarez
Poema de Pablo Javier Resa
Hambre
Sospecho el vacío
………. negro de paladar
aunque se llenen la boca de gorjeos
aunque se implanten los gorjeos
………. cantar azul de desmemoria
de qué trino
de qué ternura están hablando
si es un esqueleto el que sonríe en las ventanas
si este nido en el hierro
abre cascarones de ausencia
Intuyo el matiz
………. gris de aliento
Tangente en los altos galpones
resbalo caricias de cristales rotos
………. tobogán de chimeneas abajo
y me recupero con bolsillo de viento
………. pero viento solo
……………. viento sin nombres
……………. basural de viento
Sospecho gorjeos ……. olvidos
Intuyo grises………. ausencias
Me informo
Fabrico
Y desde tantocharco
de pococielo y muchoniño
Afirmo
Aunque se llenen la boca
estas ventanas tienen hambre
© Pablo Javier Resa
Poema de Cesar Vásquez López
En el Principio...
Increada semilla
el arcano del águila.
Antes que la materia y el caos
espíritu con alas el pájaro.
En un temblor del cosmos
arrojado Luzbel de lo Alto.
En el eterno transmigrar del alma...
Como ángeles
de Lucifer y del Hijo:
el águila y el cóndor.
Como arquetipos...
De la sombra y del rayo
estos colosales pájaros.
Anterior a las tinieblas y al sol
estalló una Semilla desde el albor.
Por el orbe
la Trinidad y sus raíces.
Floreció la simiente en Verbo...
Y en obscuridad Satán se transformó.
¡Como escudriñar!..
¿Cuándo el enigma:
es ecuación y círculo?
¡Qué misterios elucidar!..
¿Cuándo el Innombrado
es hacedor y abismo?
Habitó la Luz en las Tinieblas...
Soles ambos:
y ecos de un mismo canto.
Al eterno deambular
arrojado el taciturno hombre.
Bien y mal:
cuando el águila
sus alas agitó.
Ni corona ni espinas
el dionisíaco sino del hombre.
No hay pecado ni redención:
sólo el infernal fuego del Creador.
El huevo rompe un ave:
y en el cosmos nace, Dios.
El Acto:
era puro fulgor.
A sí mismo se engendró.
Fue fragmento y antinomia.
Y Luz de la creación.
Gira todo
en torno al Eterno.
Las creaturas de lo alto.
Las infernales:
del umbroso Hades.
Perenne fue el devenir del universo...
Sombrío calvario:
la soledad del hombre.
El Hombre...
En su noctámbulo sino:
parió ángeles y demonios.
¡El hombre!
¿ Cáscara de un átomo?
¿Polvo en el infinito?
¿El demoníaco rostro de un espíritu?
El hombre...
¿Un obscuro concepto?
¿Una imaginaria paradoja?
Cual metafísico animal...
En la cruz del madero:
abandonados sus huesos.
¿Qué es el hombre?
La mística huella:
que un águila borró.
® Cesar Vásquez López
De "Canto de Transformación"
Poema de Roxana Palacios
Los rincones muerden esta noche.
Son recortes de nadie gastando las cervicales piedra por piedra.
La araña se irrita en su tela.
No teje la pobre, cose,
desde esta geometría lenta,
con patas atadas a la sintaxis.
Tiene nudos en las manos,
pretéritos,
desiertos que cepillan contrapuntos como teclas que se achican en palabras,
disecciones,
una caparazón blanda y blanca,
la tinta aplastada contra el vidrio,
una madera con ojos sobre la biblioteca.
Piedra por piedra las manos son recortes que se gastan en sintaxis.
Piedra por piedra las patas son pretéritos,
contrapuntos,
el vidrio y la tinta en el desierto.
Piedra por piedra
los ojos
abren
voces
sobre la biblioteca.
© Roxana Palacios
Poema de Carlos Roldán
qué va a ser poeta si tira
con arcabuz y a ciegas con
ganas de orinarlo o bajarlo
o despedestarlo todo
con un ciego ramalazo de aires celestes tira
a todo y al montón
sobre sí mismo
qué va a ser poeta si cuanto queda
es un temblor de una sustancia herida
un destierro del fuego una escollera
un torpe anhelo de pájaros caídos
© Carlos Roldán
Poema de Lucía Serrano
Te amé, lo reconozco, con toda la furia y la locura de los
iniciados.
Mi cuerpo de mujer abierto a los deseos claros, se alteró
por tus celos de tenues sonidos imaginarios, y una feroz humillación
atacó la ternura, hasta hacerte un extraño en mi vida.
Para olvidarte, no encontré las fórmulas precisas.
Mi piel encadenada a inolvidables momentos, amaba la
cárcel donde habitabas con legajo de cadena perpétua.
Sin querer retroceder, acepté el sobreentendido tentador, la
posibilidad constante de un encuentro en libertad.
La memoria que convocaba mi insistencia, poseía un desafío
desmedido: “no amar la traición” y asistida por mágicas
razones, quise ser más que una mujer.
Noches encantadas del universo quimérico que pasé a tu
lado, me hicieron un jugador y seguí apostando.
Imposibilitada de cambiar de rumbo, una voluntad sagra-
da, me obliga a comprender el tiempo que nos une.
Todo fue imposible, no alcanzó ninguna palabra, ningún
gesto, ningún acuerdo, ni siquiera ningún adiós.
Hoy, deseo que nadie comprometa mi tristeza.
© LUCIA SERRANO
Del libro “Blues para la Corona”
Poema de Guada Wernicke
Poema de Salomón Valderrama Cruz
..........¡De los ojos del muerto, mi mirada
..........Paire en faceta a luz cristalizada
...................................Martín Adán
Razón innecesaria en fruición lapidaría
Por escándalo in situ, por ojo humillado.
Ilustre acabado, estás de paso helado.
Enamorado de todo lo que faltaría.
Paraíso de Cartón, leyendo, te daría
Todo, lo que no hiciera, aun en primavera.
Hipocampo embarazado, hombre de pecera.
Alma, corazón ciego, amarrado de utopía.
Libre de edad, viejo, en espera del, divorcio,
No conocer y enamorarme, ubicuidad.
No quiero en este fin, pagar, amor ni comercio.
Actuar y no pensar; haber gozado elevación.
Clonación, mutación tardía, espero en verdad:
Niño del ocaso, acertijos de sublevación.
© Salomón Valderrama Cruz
20.12.06
Poema de Daniel Tevini
Pater Profundis
está la muerte bebiéndome en la arena
descalza
sobre un hombre y su mirada
Pater
hay lirios leprosos y manos doblegadas
hay cenizas y faunos en las muecas
en los vientos femeninos de sus gestos
Un vaho virginal
………………… vigilia y moho
Un cielo salitral
……………….. celo y suicidio
Onán cae hacia la luna
Un anciano devora el sexo de mi sombra
© Daniel Tevini
De “Hotel Des Bains”
Poema de Carlos Carbone
EL EXTRANJERO
.................. (a Antonio Aliverti)
¿Quién vive del otro lado del humo?
¿Es suyo ese lenguaje que juega
………. con los límites del entendimiento?
¿En aquel extremo hay grietas en la tierra?
¿También allá existir es una tragedia?
¿Quién sueña del otro lado del mar?
¿Hay muertos ilustres bajo las bombas
……..y la complicidad?
¿Hay hombres en medio del fastidio?
¿Es absurdo el viento cuando la vida se esconde?
¿Quién es extranjero cuando el tigre sale de ronda?
¿Se puede mirar por la ventana de la sabiduría cuando
……todo se cae?
¿Quién vive del otro lado del humo
…..dando vueltas entre metáforas de espejos?
© Carlos Carbone
Poema de Graciela Pucci
….. Estás aquí
-como cuando niña-
te veía sólo por las noches
………. el día
una sucesión de muñecas sin sentido
………. no estabas
………. y estabas
……………. en el olor de la almohada
en los pantalones ... impecablemente colgados
en el saco al que abrazaba
……………………… cuando me dolía más allá del pecho
………. Estás aquí
-como cuando adolescente-
tu mirada de ave mutilada
………………. hacía nido en mis ojos
-Impotente ante la autoridad
………………. que desautorizaba-
............ Estás aquí
-como cuando era casi adulta-
me negué a vestirme de blanco
….. (¿te acordás?)
….. volviste a callar
….. ¿qué podías hacer?
tu alma comulgó con la mía
………………….. cómplice de un error
………… Estás aquí
-como cuando te regalé tres soles-
iluminaron la dura tarea que te impuso la vida
….. arrastrabas dolores antiguos
…………………. lastimaban tus sueños
………………………. te borraban sonrisas
también te regalé mis palabras
………………….. transformadas en poemas
-las eché a volar junto a tu nombre-
………………….. llegaron a destino, sin destiempos
….. Hoy no estás
pero estás conmigo
acompañás mi sueño –inquieto como el tuyo-
tu figura
………. me sigue guiando
……………….. estás a mi lado
¿por qué dicen que no estás vivo?
© Graciela Pucci
Poema de Antonio Miranda
II
Lluvias en movimiento constante, caminantes,
errantes, intempestivas. Seguidas de soles
abrasantes, ardientes, inclementes. Lluvias
torrenciales y estíos intermitentes, insistentes
que secan la tierra, caminos distantes. Calores.
Éramos tan pequeños en aquellas aguas
todas, ¡y los árboles enormes!
Andábamos descalzos, desnudos, a la ventura,
inocentes de tantas maldades atávicas,
tan indefensos a pesar de rezos y misas..
Pisando pozos de agua estancada, matorrales
vecinos cerca de casa— ¡tan distantes!
corriendo y gritando, saltando troncos
caídos, bejucos y raíces aflorados.
Tropezando, levantando y entrando
en los espejos de nubes trémulas,
reflejando espacios andantes, inestables.
III
La sensación lívida y temerosa de las acciones
inconsecuentes, libres de vigilancia
y cuidados. Sueltos. En algazara.
¡Qué inocente sensualidad! Aguas transpirantes.
Inconscientes del placer compartido,
ausentes de cualquier responsabilidad.
Cuerpos imberbes rozando, arrepintiéndose,
como peces resbaladizos entre hierbas
fluctuantes, agarrándose, palpitantes,
enfrentándose con furia, extenuados.
Exuberantes como explosiones vegetales,
como animales libertos, triunfantes.
Hasta que uno inmoviliza al otro, vencido
por el cansancio, por la fatiga, por el peso
del cuerpo. Sobre la presa inerte, jadeante,
mordiéndola con ímpetu y sintiendo
un sabor vivo de saliva y espanto.
Poema de Marian Muiños
Para no sufrir abandoné la lira
y los soles
y perfumes
y sabores.
Tomé el destino
con rienda firme
y vi el precio de cada día
inscrito en la cabalgadura.
Compré. Vendí. Alquilé. Presté.
Todo.
Menos atención a la soledad.
La disfracé de tiempo laborioso,
capitalicé las horas,
perdí dividendos de interioridad.
Sólo quedaron palabras
–madre, hijo, amor, padre–
gravitando sin sentido.
No recuperé los sones.
Los perdí por el camino.
© MARIAN MUIÑOS
Poema de Paolo Astorga
SÍNTESIS DE UNA IMAGEN MAL PINTADA
Ella escondía su sueño
Ella escondía su sueño
© Paolo Astorga
19.12.06
Poema de Graciela Maturo
V. Agua de azogue
…………………..a Hanna Houskowá
Agua sinuosa y verde del Vildava
lenta, sombría, luminosa, sola.
Agua de azogue, densa de misterios,
detenida en la negra madera de los molinos.
Miro tus cisnes irreales sobre el mercurio
tembloroso de lluvia.
Tus cisnes negros, blancos,
custodiando el secreto silencioso del tiempo.
Agua majestuosa del Vildava
cruzada de puentes, de peregrinos.
Puente Carlos, lugar sagrado,
templo a la intemperie.
Volveré a esta ciudad que está en mi vida para encontrar la llave,
las puertas del castillo.
© Graciela Maturo
Poema de Rubén Balseiro
In memorian
……………... A mi abuelo
………………Leopoldo Balseiro
Cuando la muerte se le montó en el pecho
como en un alazán desbocado en la noche,
comprendí que ciertas cosas
quedarían pendientes para siempre,
cosas que se acercaban a los pájaros,
cosas del viento y sus caprichos,
de la lánguida distancia de los años.
Cosas que él comprendía y sabía muy bien
y que ahora
se alejaban de mis ojos en un galope atroz,
desmesurado,
dejándolos vacíos y sedientos;
como aquellas ventanas
desde donde veía estirarse las calles al olvido,
en esa madrugada de otoño
de hace ya tantos años.
© Rubén Balseiro
Poema de Susana Fernández Sachaos
Hay un clamor rojo en el aire.
Un pájaro de fuego cruza
a ras del agua.
He visto llamear la lejanía,
la tengo en la mirada,
con otro ánimo, con otra espera,
se repite ese fulgor.
Una dicha existía y ahora vuelven
esas alas rojas que son mías
y del ave de fuego.
Somos dos y uno en el poema.
Lejos quedó una tierra quemada
por el infierno de los hombres,
a la que no volveremos;
porque somos el ave y yo,
fugitivos de esa tierra.
Porque seremos el fuego, las alas,
la sangre de las sombras.
© Susana Fernández Sachaos
Poema de Graciela Wencelblat
Es fugaz la luz entre las ramas
el mirlo desentonando
las caricias de tu mano.
Esconden ronroneos
soledad brusca
que adoquina sentimientos.
Tanto escondido
gastado o perdido
y el espejo que no graba
las distancias.
Se rompe en mil pedazos
la cara de la muerte
la vida tan cara.
Y tu otra mano.
© Graciela Wencelblat
Poema de David Rosario Sorbille
Imágenes de mi ciudad
“Nostalgias de las cosas que han pasado,
arena que la vida se llevó”.
.......................................Homero Manzi
Escribo desde mis recuerdos
esas cosas que llevo en mi corazón,
como duendes sentados en un viejo tranvía
donde nacieron versos e ilusiones
que se llevó el tiempo,
desde la nostalgia por aquella barra esquinera
de Baigorria y Marcos Paz,
el camino bohemio y soñador
por los cafés de mi ciudad,
los trabajos y los días errantes
y la brisa del atardecer
asomando en las ventanas,
el vals y tus ojos
siempre danzando con los míos,
la vida girando en metáforas
como serenatas en noches de emociones,
rostros queridos, palabras sonoras,
imágenes porteñas que siguen conmigo
David Rosario Sorbille
De “Poemas a la vida”
Poema de Anamaría Mayol
SI SE ACALLARAN LAS VOCES
Si las estrellas no estuvieran
vigías
……………..centinelas de mi alma
si el viento no existiera
no agitara las llamas de mi hoguera
si las lluvias de otoño
no habitaran mi cuerpo
si se acallaran las voces
si el silencio no derramara signos
en mi almohada
¡Qué desolada tristeza tendría mi insomnio!
¡qué hueco el corazón¡
© Anamaría mayol
Poema de Ernesto Marcos
La escena,
la esencia del tú y del él.
El que soy, dentro
yo que soy fuera.
La forma de la escena,
que es el nosotros, sin mí
yo que no soy la escena,
soy en la escena.
Soy un circulo:
del espectador a la escena,
de la escena al espectador,
cruzándola en línea recta
llegó al yo, por mí, sin mí.
Más allá del límite la misma mirada;
más acá yo, ahí mí, allá yo, sin mí.
Tú es el mí en la escena,
yo... soy otro, pero más acá,
ahí soy tú, allá soy él.
Soy nos-otros,
adentro y afuera,
aquí y allá,
en todas partes
y en ninguna.
©Ernesto Marcos
Poema de Cristina Pizarro
XIV.GERTRUDIS GLAUBEN Y EL POZO DE AGUA
se incendian
…………… nuestros nombres
…………………… grabados
en el leño
fulguran las hojas
………………. inmortales
…………………….. del madroño
en las tinajas
…………… hay reflejos fugitivos
………………………….. que espesan el misterio
el borde es un secreto
…………………… hundido
………………………….. en el silencio
que se abisma
……………. en la Palabra
me detengo
…………… veo el espejo oscuro
me asomo
………… un círculo
………………….. se angosta
allí
…… las aguas claras
en el pozo de agua
………………… hallo
……………………….. mi Ser
© Cristina Pizarro
17.12.06
Poema de José Luis Visconti
podía
tratarse tan solo
de la conjunción de caracoles
muertos y piedras al borde
del estropicio
……… pero el calor del volcán
……… admitía otras lecturas
no hubiera hablado
de lo que quedaba
……… -la bifurcación de la Historia
……… el antes y el después-
de no ser por ella
……… que se asoma al escándalo
……… de advertir el error en la caída
no hay cálculos benignos
en este paisaje
……… lo intuye
el fuego siempre se devora
hasta las cenizas
en las entrañas
ningún resultado es aceptable.
© José Luis Visconti
Poema de María Judith Molinari
LEONOR ACEVEDO DE BORGES
Cuántas veces hablamos en la plaza
bienechora de verdes y de sombra.
El espléndido árbol que te nombra
hoy me ha traído, aquí, frente a tu casa.
Me hace bien visitarte. No es escasa
esa ley de la tarde que aún asombra.
Altas voces bajaron. Una alfombra
con pétalos azules se desplaza.
Sosegado este banco me recuerda
aquel tiempo pasado que concuerda
con las cintas celestes de tu gloria.
Así te sigo viendo en mi poesía,
Tus lúcidas mañanas, tu alegría
me ayudan a nombrarte en esta historia.
© María Judith Molinari
Poema de Rosa María Sobrón
Relato
Eran tardes únicas atisbando horas.
Cómplices de sueños.
Juntábamos ternuras y luceros.
Olor de pino fresco en un gajo robado.
El cielo pueblerino
estallaba de luces
en las noches.
Y la Misa de Gallo era ya una
aventura.
Flotaban sin cansancio
las flores en comparsa.
(Los niños con el Niño
enamoraron años)
Una frescura inédita de salvia y de romero
llegaba desde el agua chiquita del arroyo.
La noche
herida de canciones
no sabía de guerras ni fusiles.
La mesa familiar agotaba sabores.
Era una dinastía de estrellas
en el cielo.
Cruz del Sur,Tres Marías
ardían movedizas.
Y no alcanzaba el ojo
para tender cometas
y enlazarse en alguna
con un temblor de pájaro.
El broderie volaba
en faldas de azucena.
Un ángel dibujaba con cruces
la inocencia.
© Rosa María Sobrón
Prosa de Sonia Quevedo
ROTO EL SILENCIO
Nuevamente el silencio esta noche ha sido roto por el llanto.
Lacerado su pequeño cuerpo estila sangre, hasta casi borrar su piel tan blanca.
Han arrancado la risa de sus labios, colocando en ellos un terror pasmado que impídele exhalar corto el suspiro, colapsando el corazón ya sin latidos.
Esta noche el cielo dolorido no ha brillado, porque todo duele y nada puede, remediar la suerte de los niños tristes.
Otra noche al borde de los sueños ha quedado, el ansia de vivir sin ser robada, la infancia tierna, la inocente edad con sus juguetes, y el sonoro canto con sus trinos y su risa.
Nuevamente el dolor de otro pequeño cuerpo lacerado, el silencio ha roto esta noche con su llanto.
© Sonia Quevedo
Poema de Xenia Mora
CASA VACÍA
Espejos flotantes en la nada
cubren el rostro de la casa
habitaciones vacías de risas,
objetos silentes oran las cruces
de seres queridos con ojos sin tiempo.
Se escurre el frío de la ausencia:
libros dormidos esperando
difuminan resquicios escolares,
como el tablero de ajedrez
donde falta la reina con su rey
las torres están derruidas
y los peones se han rendido.
Turbulentas estelas de polvo
se desvanecen en los estantes,
esperando que vuelvan
los hijos con sus hijos
y los espejos con ellos
reflejen las risas.
© Xenia Mora Rucabado
Poema de Francisco José Malvárez
EXTRAÑO
Ventilo mis ojos
en esta tarde de Otoño,
seco historia que traspiran.
Quiero abrazarte,
esto me urge.
Se me ha soltado el mar
que quiere tragar elefantes,
abrazarte como nunca,
volverme tenaza gigante,
tenaza del universo,
apretarte contra mi alma,
hacerte elefante y tragarte.
Me urge,
no me sobra la vida
y los sueños se agotan
y este mar que me invade,
esta sed de elefantes
y esta urgencia que me atropella,
esta urgencia, te decía,
de hacernos uno.
© Francisco José Malvárez
Foto: Gustavo Tisocco